Luego de su triunfo 2-0 en la ida, los Gunners vencieron por 3-1 al elenco italiano para instalarse en los cuartos de final prácticamente sin sobresaltos. El doblete de Welbeck y el restante tanto de Xhaka ayudaron a dar vuelta un marcador que Milan había abierto a través de Çalhanoglu. Además, Red Bull Salzburg ratificó su condición de revelación al dejar afuera al Dortmund y Lyon se quedó afuera increíblemente ante CSKA Moscú como local.
Una de las llaves más entretenidas de esta Europa League tenía que cerrarse hoy en Londres, y Arsenal pretendía completar en el Emirates la tarea que comenzó en Italia superando 2-0 a Milan, que visitó la capital inglesa con una alineación orientada en busca de la hazaña. El Neroazzurro sorprendió al inicio generando la primera jugada de peligro del partido, en la que un centro de Fabio Borini dejó en posición de gol a André Silva y el portugués pateó desviado. No obstante y una vez superado ese susto, el control del partido fue de unos Gunners que dominaron la pelota y alejaron a su rival del arco de David Ospina. Se juntaron seguido Jack Wilshere, Aaron Ramsey, Mesut Özil y Henrikh Mkhitaryan, que tejieron algunas buenas acciones por izquierda y otras por derecha, aprovechando las subidas de Héctor Bellerín. Igualmente, la más nítida de ese lapso llegó en una réplica: Özil puso a correr a Danny Welbeck, y éste después de hacer la individual sacó un disparo que Gianlugi Donnaruma repelió con las piernas. Sin embargo, y contra todo pronóstico, fueron los de Gennaro Gatusso los que dieron el primer golpe. A los treinta y cinco minutos, un remate espectacular de Hakan Çalhanoğlu desde veinticinco metros sorprendió a Ospina y se transformó en el 1-0. Había ilusión para el cuadro italiano.
Arsenal tuvo una reacción positiva al golpe inesperado y continuó buscando un gol que no iba a tardar en llegar, aunque en una jugada muy polémica. Luego de una ocasión de Ramsey, quien hizo trabajar a Donnarumma con un zurdazo desde la medialuna, llegó la acción más discutida del partido, que tuvo influencia en el resto del juego: Welbeck cayó en el área ante una supuesta falta de Ricardo Rodríguez y el juez Jonas Eriksson sancionó un penal inexistente que el propio Welbeck cambió por gol, restableciendo la igualdad. Milan se animó a lastimar durante los siguientes minutos, pero luego de atravesar ese periplo fue Arsenal el equipo que cerró el primer tiempo amenazando nuevamente el arco de Donnarumma: un cabezazo desviado de Mkhitaryan tras que Welbeck le bajara el balón y un bombazo de Wilshere atajado por el arquero visitante casi amplían la ventaja de los de Arsène Wenger antes del descanso.
En un duelo en el que todavía no estaba todo dicho, el primer cuarto de hora del complemento fue un entretenido golpe por golpe. El local tuvo dos ocasiones claras que nacieron en los pies de Özil: primero el alemán habilitó a Mkhitaryan y éste sacó un remate al primer palo que Donnarumma mandó al córner, mientras que luego le obsequió la chance del gol a Ramsey, pero el galés la tiró por arriba del arco. Sin embargo, Milan también se animó y pudo haber puesto en problemas a los Gunners. Un zurdazo de Suso al tomar un rechazo corto pasó muy cerca, mientras que minutos después un centro de Borini a Patrick Cutrone, quien ensayó una volea que salió al lado del poste izquierdo. Después de ese lapso alocado, el conjunto inglés consiguió aplacar un poco el ritmo del partido, y con esto llegó el 2-1 que terminó de encaminar la eliminatoria. Granit Xhaka recibió un balón cerca de la medialuna y sacó un zurdazo envenenado que se transformó en gol con la colaboración de Donnarumma, quien no pudo retener el intento del suizo. Ya sobre el final, Arsenal le dio el golpe final a los neroazzurri con un contraataque muy bien ejecutado. Wilshere apareció por izquierda y tiró un muy buen centro para Ramsey, cuyo cabezazo fue tapado por Donnarumma, pero el rebote le quedó servido a Welbeck para decretar el 3-1 final. Aire para un equipo de floja temporada, que más que nunca apunta sus cañones a una Europa League cuya importancia se ha tornado vital tanto para los Gunners como para el cuestionado Wenger, ya que ganarla es el camino más viable no sólo para maquillar la campaña, sino también para su vuelta a Champions League.
Un pedazo de historia en el Red Bull Arena austríaco
En lo que fue una llave histórica para el fútbol de Austria, el Red Bull Salzburg igualó 0-0 como local, pero hizo valer el 2-1 en la ida para dejar afuera al Borussia Dortmund y decretar el pasaje a cuartos de final de Europa League para un club austríaco por primera vez. Y lo cierto es que la eliminatoria de los Rotten Bullen fue muy superior a la de su rival. El dueño de casa tuvo muchas ocasiones, y muy claras, para llevarse el partido hoy, pero se encontró con una sólida actuación de Roman Bürki, el arquero de los germanos. En la primera, Munas Dabbur dejó al coreano Hee-Chan Hwang de cara al gol, pero éste no pudo en el mano a mano ante Bürki, que más tarde le iba a negar el gol nuevamente al enviar a córner un disparo suyo al primer palo. La producción de un impotente conjunto Borusser fue muy desdibujada, intentando con muchos centros y pelotas paradas que fueron bien defendidos por el local. Los austríacos tuvieron una más antes del descanso mediante una combinación entre Hwang y Xavier Schlager, jugada que se ensució en el caminó y terminó con un disparo de éste último que Bürki volvió a mandar al tiro de esquina. Recién la primera chance seria del Dortmund estuvo a los veinte minutos del segundo tiempo, con una habilitación de Batshuayi para Alexander Isak, que no pudo batir al arquero Alexander Walke en el mano a mano. La última del elenco alemán también fue para el joven Isak, cuyo remate a bocajarro fue salvado en la línea por un defensor. Fue 0-0, pero aún sin ganar hoy este Red Bull Salzburg ha escrito una gran página en la historia del fútbol de su país, dejando de lado a un animador de los últimos años en Europa y logrando algo inédito como lo es el pasaje a cuartos de final. Los dirigidos por Marco Rose buscarán ahora seguir dando que hablar.
Los rusos coparon Francia y se llevaron el pase a cuartos
En el último de los partidos, el Lyon buscaba concretar su avance a cuartos tras el triunfo en Moscú ante el CSKA, pero terminó llevándose una sorpresa inesperada. El cuadro soviético se llevó un 3-2 del Parc Olympique Lyonnais que edificó a partir de un golpe certero cerca del descanso. Alan Dzagoev abrió hacia la izquierda con Aleksandr Golovin, este se acomodó y sacó un tiro colocado inatajable para Anthony Lopes que se transformó en el 1-0. No obstante, el elenco francés inició mejor la segunda parte y llegó al empate antes de los diez minutos a través de un desborde de Jordan Ferri con posterior centro atrás para que el marfileño Maxwel Cornet establezca el 1-1. Desde ese punto, el partido atravesó por un cuarto de hora plagado de goles en el que el visitante hizo la diferencia. A los quince minutos Golovin encontró una proyección de Kiril Nababkin, quien sacó un envío raso para el anticipo de Ahmed Musa, autor del 2-1 para el cuadro ruso. Cinco minutos después llegó el gol que iba a terminar decidiendo la historia: Konstantin Kuchayev ubicó desde la izquierda a Pontus Wernbloom, que llegó sin marca y conectó a la red para el 3-1 del CSKA. Lyon, sin embargo, intentó reaccionar y consiguió el descuento a veinte minutos del final en lo que ya era un partido loco. Bertrand Traoré sacó un centro bombeado en dirección de Mariano Díaz, que acortó la brecha y mantuvo la esperanza de los franceses. Sin embargo, los embates finales del dueño de casa no pudieron quebrantar la resistencia de los Koni, que alcanzaron los cuartos de final de una competición europea tras 9 años -lo habían hecho en Champions League- y buscarán seguir sorprendiendo a propios y extraños.
Foto destacada: Reuters