Tercer triunfo al hilo para un “Rossonero” que ve nacer una nueva esperanza. Napoli pudo darlo vuelta ante Udinese y continúa al acecho. Inter empató con Fiorentina y cedió terreno.
Episodio 30 de la Serie A y el margen de error es cada vez más exiguo. La presión juega un partido especial porque ya no hay rivales fáciles y los 3 candidatos al scudetto saben que no pueden dar un paso en falso.
En su visita al Unipol Domus (ex Sardegna Arena y antes Santa Elia) Milán derrotó 1-0 a Cagliari y continúa en lo más alto del campeonato. Vital triunfo ante un necesitado de escaparle a la zona candente y muestra de carácter para el “Rossonero”, que en sus últimos 3 juegos se impuso por la mínima.
Cerca de la hora señalada llegó el solitario gol del encuentro. Brahim Díaz metió un centro corto para Olivier Giroud, quien aguantó el cuero y descargó hacia atrás para Ismael Bennacer. Espectacular volea de zurda del argelino, para dejar como estatua a Alessio Cragno y sacudir la red sarda.
Claro que si no se sufre, no vale. Leonardo Pavoletti tuvo el empate con un cabezazo de pique al suelo pero la bola se estrelló en el travesaño y los de Stefano Pioli pudieron mantener el arco en cero por cuarta vez consecutiva.
No fue sencillo para Napoli, que lo perdía en el Stadio Diego Armando Maradona pero que gracias a una doppietta de Víctor Osimhen venció 2-1 a Udinese. Los friulianos venían de una serie de 4 sin derrotas – con 1 halago y 3 igualdades – y no podían descuidarse si querían alejarse de los puestos de descenso.
Y fue la visita la que golpeó primero en el minuto 22, cortesía de Gerard Deulofeu. El catalán recibió un toque corto de Roberto Pereyra desde el borde del área y depositó el balón junto al vertical de la mano diestra del arco defendido por David Opsina.
La reacción de los “Azzurri” – hoy de rojo furioso – llegó apenas iniciado el complemento. A los 52´, un tiro libre en forma de centro de Mario Rui desde la izquierda fue cabeceado al gol por Víctor Osimhen. Y 9 minutos más tarde, Matteo Politano metió un pase en cortada para la escalada de Giovanni Di Lorenzo, quien puso el centro atrás para la llegada de Osimhen. Anticipo ofensivo perfecto del nigeriano para sellar doblete y el triunfo sureño.
Inter volvió a jugar con el freno de mano puesto y el empate 1-1 con Fiorentina en el Giuseppe Meazza lo relegó un poco de su archirrival citadino. La semana pasada rescató un punto en su visita a Turín y ahora no supo cómo doblegar a los toscanos, que extendieron a 3 encuentros su racha sin derrotas.
La squadra viola – más bien gialla porque hoy jugó con una camiseta amarilla – se adelantó en el marcador por intermedio de Lucas Torreira, a los 50´. Gaetano Castrovilli lo buscó a Nico González dentro del área y el nacido en Escobar barrió con la defensa local. Centro la muerta y plena conexión con el uruguayo de Fray Bentos, para cuarto grito sagrado de Torreira en la temporada.
Sin embargo, el vigente campeón italiano no se desesperó porque alcanzó la paridad 5 minutos más tarde, con un tanto de lateral a lateral. Envío de Iván Perisic desde la izquierda y aparición por el fondo de Denzel Dumfries para decir con la cabeza y empardar el resultado.
Nueva función para un Sassuolo que cada día juega mejor. En el MAPEI Stadium, Cittá del Tricolore, el “Verdinegro” vapuleó 4-1 a Spezia y cosecha 4 éxitos en sus últimas 5 presentaciones.
Los de Alessio Dionisi quebraron el cero a los 17´ gracias a un penal. Falta de Viktor Kovalenko sobre Davide Frattesi dentro del área y pena máxima que Domenico Berardi transformó en gol.
Minuto 36 y los “Aguiluchos” levantaron vuelo para nivelar el score. A Daniele Verde le quedó una pelota suelta en el área y metió una extraordinaria pincelada con su pie izquierdo, para alojar la bola en el ángulo superior derecho. Un verdadero golazo.
Claro que el poderío ofensivo del “Verdinegro” afloró en el segundo tiempo y no es casual que Roberto Mancini haya convocado al tridente de ataque para los compromisos de la Nazionale por un lugar en la próxima Copa del Mundo.
A los 48´, Gregoire Defrel habilitó a Berardi y el delantero de Cariati Marina venció a Iván Provedel con un remate de derecha. El turco Kaan Ayhan liquidó el pleito a los 78´ con un derechazo con el revés del pie cuando le quedó una pelota picando luego de un tiro de esquina.
La goleada tomó forma 3 minutos más tarde, con un tiro libre de Gianluca Scamacca desde afuera del área que pasó por el medio de una barrera mal armada.
Y sucedió una noche porque no puede llover todo el tiempo: Genoa le ganó 1-0 a Torino en el Luigi Ferraris y terminó con la extensa racha ¡26! partidos sin victorias. Todavía en zona de descenso pero al menos con una inyección anímica que vuelve a encender la llama de la esperanza.
El grito sagrado de los “Grifoni” llegó en el minuto 14. Escalada del danés Morten Frendrup por derecha y centro al corazón del área chica que mostró las dudas de Etrit Berisha. El portero albanés quiso rechazar y la pelota rebotó en su compañero Armando Izzo. Le quedó servida a Manolo Portanova, quien aprovechó el obsequio y desató la locura genovesa antes del cuarto de hora.
Pero fue más que sufrido el necesario triunfo local porque a los 24´ el noruego Leo Ostigaard recibió la segunda tarjeta amarilla y se fue expulsado. Los del germano Alexander Blessim soportaron los embates del “Toro” y se quedaron con 3 puntos fundamentales para la recuperación.
Por Emiliano Schiavi / @ejschiavi
(Foto Principal: @acmilan)
