El arquero vasco tapó 2 penales en la definición y la “Furia” sumó una nueva estrella continental. Quinto título para los ibéricos, que junto a Francia son las únicas selecciones en ganar Copa del Mundo, Juegos Olímpicos y ahora la Nations League. Italia se quedó con el consuelo del bronce al vencer al anfitrión en el primer turno.
Festejo en clave rojo en la III edición de la UEFA Nations League porque los penales decidieron al campeón. En el Feyenoord Stadium, en el puerto de Rotterdam, España y Croacia empataron sin goles durante 120 minutos pero desde los 12 pasos la “Furia” se impuso 5-4 y gritó ¡campeona!.
Una final cerrada pero que mereció algún grito sagrado. Los de Luis de la Fuente jugaron con la idea de siempre, con ese culto a la posesión y circulación del balón por todos los sectores del campo. Claro que eso no asegura nada porque de vez en cuando hay que patear al arco pero España tuvo chances como para quebrar el cero pero en algunas ocasiones faltó la puntada final o hubo un salvador inesperado.
Del lado de los balcánicos está la paciencia de siempre con un mediocampo de lujo. El cerebral Modric ayudado por 2 ruedas de auxilio que manejan la pelota con criterio como Brozovic y Kovacic, manejó los tiempos de un equipo acostumbrado a la lucha y el rigor físico. Los que se basan en la tabla del Excel suelen anotar la cantidad de pases que Luka mete por partido pero los que solemos dejar el celular en la mesa mientras vemos el partido ya nos damos cuenta que Modric jamás da un pase mal y que tiene una extraordinaria visión de juego.
Livakovic casi se manda un blooper con un envío de Jordi Alba que parecía controlado y la bola se le resbaló para luego rebotar en el poste. Los “Ajedrezados” inquietaron con las constantes escaladas del polifuncional Iván Perisic, quien arrimó peligro con 2 apariciones por sopresa y sendos cabezasos apenas desviados.
Pasada la hora de juego De la Fuente mandó a la cancha a Ansu Fati y allí se vio más frescura en la montonía de pasar la pelota para los costados. El jugador de Barcelona entró muy bien en el juego y tuvo una chance clarísimia que Perisic salvó en la línea cuando Livakovic estaba vencido.
Croacia curtida en esto de la prórroga llevó el partido al terreno que más le convenía. España era un cúmulo de buenas intenciones pero no alcanzaba para quebrar a un aguerrido elenco balcánico. Los penales asomaban como algo inevitable y el campeón se decidió desde los 12 pasos.
Tres ejecuciones por bando con éxito por parte de Vlasic, Joselu, Brozovic, Rodri, Modric y Merino. Unai Simón usó su pierna para detener el de Majer y Asensio puso el 4-3 en favor de los ibéricos. Perisic empardó el marcador y la chance del título estaba en el pie izquierdo de Laporte. Pero el fierrazo del defensor del Manchester City sacudió el horizontal y le dio una vida más a los croatas.
Serie de uno y Petkovic no pudo ante un encendido Unai Simón. Nueva oportunidad y esta vez le tocó a Dani Carvajal. Homenaje a su ex compañero Sergio Ramos porque la picó con una categoría (y personalidad, digamos todo) para engañar a Livakovic y desatar la euforia roja.
Quinto título para España, vencedora del Mundial 2010 y las Eurocopas 1964, 2008 y 2010. Lo que empezó Luis Enrique lo terminó su tocayo de la Fuente. La idea de base jamás se traicionó y la identidad que la “Furia” supo construir está a salvo y con una excelente proyección.
Era el “Last Dance” ideal para una generación de Croacia que llevó al seleccionado balcánico a un protagonismo bien ganado. Quizás faltó coronarlo con algún título pero el reconocimiento quedará por siempre aunque no hayan bebido el sorbo de una copa.
El aperitivo estuvo en Enschede, donde Italia derrotó 3-2 a Países Bajos y se quedó con el tercer puesto. Es curioso pero en el fútbol suele pasar que festeja más el tercero que el segundo: por supuesto que perder una final es doloroso pero la motivación que implica subirse al podio hace que el famoso “partido que no le importa a nadie” sea atractivo y con goles.
Federico Dimarco abrió la cuenta con un tremendo zurdazo a los 6´ y Davide Frattesi estiró la ventaja 14 minutos más tarde, luego de aprovechar un rebote en un disparo de Gnonto que lo habilitó por completo.
Descontaron los locales a los 68´ con una sensacional pisada de Steven Bergjwin para hacer pasar de largo a Dimarco y el derechazo al segundo palo. Enseguida la “Azzurra” sofocó la reacción con una réplica fulminante de Federico Chiesa para el 3-1 apenas 4 minutos más tarde.
Nuevo descuento neerlandés a cargo de Georgino Wijnaldum en el minuto 89, como para ponerle algo de suspenso a un encuentro que fue entretenido de principio a fin.
Por Emiliano Schiavi / @ejschiavi
(Foto Principal: @EURO2024)
