Chacarita e Instituto igualaron 2-2 en un partido donde la lluvia fue la principal protagonista debido a que no se pudo plasmar el juego que los equipos querían. Sin embargo se jugó con total normalidad y Pablo Vegetti marcó los dos tantos para el conjunto cordobés, mientras que Ramón Lentini y Leonardo Baima lo hicieron para el Funebrero.
Mientras que a veinte kilómetros del estadio de Chacarita Juniors no se iba a disputar una final de Copa Libertadores por el estado del campo de juego, en San Martín, que había caído la misma cantidad de agua que en La Boca pudo disputarse con total normalidad el encuentro que culminó en empate por dos. Si bien el terreno estaba muy cargado y no se pudo jugar como los equipos hubieran querido, en ningún momento, Jorge Broggi paró el compromiso o puso en duda la continuidad.
El conjunto del Flaco Vivaldo presionó a su rival en los primeros quince minutos e intentaba hacer pases cortos cuando el césped estaba complicado para hacerlo. Del otro lado, los cordobeses habían entendido mejor lo que tenían que hacer y apostaron por levantar la pelota. Fue así que aprovecharon un córner para que Pablo Vegetti se infiltrara por el área chica y marcara el 1-0 a los 17 de la primera parte.
Aunque Chacarita intentó y estuvo muy cerca de igualar el marcador, no pudo hacerlo en los primeros 45 minutos y por eso se fueron al descanso en desventaja. Pero a los 54 minutos, el árbitro del partido concedió un penal para el equipo local que Ramón Lentini canjeó por gol rematando a la derecha del arco y empatar el partido.
El encuentro se tornó parejo, de ida y vuelta, sin embargo, Vegetti aprovechó nuevamente tras un tiro de esquina, en donde quedó la pelota en suspenso dentro del área chica y el jugador la empujó. Otra vez, La Gloria se ponía en ventaja sobre el Tricolor. Matías Sánchez se retiró con una molestia e ingresó Leonardo Baima en el Funebrero. El zurdo entendió mejor el juego y comenzó a tirar centros, pero a tres minutos del final aprovechó una situación inmejorable, aunque era difícil de concretar. Desde unos pasos afuera del área ejecutó un tiro libre, colocó la pelota a la izquierda de Julio Chiarini y gritó lo que fue el último tanto del partido.
La última vez que los locales habían metido un gol de tiro libre fue contra Tigre en el debut por la Superliga, en el mismo arco, con la misma lluvia y contra el mismo arquero. Baima, luego del compromiso dialogó con Pasión Tricolor y dijo: “Nos juega en contra el ADN de Chacarita que es intentar jugar siempre, nosotros no estamos acostumbrados a tirar la pelota ni cuando vamos perdiendo ni cuando vamos ganando. Estoy feliz en lo personal y grupal porque a pesar de que fuimos perdiendo lo pudimos empatar”.
Foto: @MatiPrinc