El jugador de los botines rojos reestablece la conexión con la dirigencia. En el club le conceden la dirección técnica de una categoría de las divisiones menores.
“Siempre espere este llamado, pero lo veía lejos” confesó el ex atacante del equipo. Varios expedientes harán recordar a los hinchas la carrera del jugador en Mendoza.
Fue una de las relevaciones de las divisiones menores del “Tomba”. En 2008 se retrotrae su historia con el calzado que lo caracterizo en un clásico de ida y vuelta ante Independiente Rivadavia de Mendoza.
Previo al primer compromiso, la utilería del club sufrió un robo sorpresivo y cada jugador tuvo que renovar los accesorios de la práctica deportiva. Los Adidas F50 acapararon la atención del jugador en un reconocido shopping de la provincia.
Le tocó ingresar en la segunda parte, y uno de los ayudantes, le sugirió que los utilice. Como si fuera obra de arte, convirtió uno de los goles para consagrar el triunfo ante la “Lepra” en el Malvinas Argentinas.
Transcurrieron los años y el protagonista vuelve a ser reivindicado en la preparación de jugadores de la entidad mendocina. La dirigencia le propone dirigir la séptima divisional de los torneo de la Asociación del Fútbol Argentino.
En sintonía con Dos de Punta, asimilo: “Es algo emocionante. Estas semanas son felices para mí. Sabía que en algún momento se me tenía que dar una oportunidad así. Ni dude en volver al club”.
Foto: Noticias de Mendoza