Mano abierta para los capitalinos, que jugaron a la generala con los del Principado. “Les Scoistes” dieron la nota y vuelven a disputar una final tras de 60 años.
París Saint Germain aplastó 5-0 a Mónaco y jugará el partido decisivo de la Copa de Francia por 15ta vez en su historia. Tremenda paliza de los entrenados por Unai Emery ante un equipo monegasco que priorizó la Ligue1 y la UCL, ya que presentó en cancha mayoría de suplentes.
A los parisinos le han salido 2 piedras en sus zapatos en esta temporada liguera y no es tarea fácil continuar con su hegemonía local. Es que tanto Mónaco como Niza se han mostrado como rivales de fuste y el ansiado pentacampeonato se complica más de lo esperado.
Por lo pronto, PSG le dio una lección a los del Principado en las definiciones mano a mano, ya que goleó 4-1 en la final de la Coupe de la Ligue y ahora lo dejó en el camino hacia la definición de la Copa de Francia con un abultado marcador.
A los 26 minutos se rompió la paridad con un regalo del arquero Morgan de Sanctis. Un remate de Ángel Di María encontró una floja respuesta del guardavallas italiano y el rebote corto le quedó a Edinson Cavani, quien metió el balón hacia el medio para la entrada de Julian Draxler. El alemán solo tuvo que eumpujarla para gritar el primero.
Cinco minutos más tarde apareció la categoría del uruguayo de Salto para elevar la cuenta a 2. Buen desborde y mejor pase desde la banda derecha por parte de Di María y Cavani ensayó un taco delicioso que dejó sin recursos a De Sanctis. Golazo y aroma a partido liquidado.
En el complemento la tónica no cambió demasiado y en 2 minutos PSG terminó de destrozar a Mónaco. A los 50´ un centro envenenado desde la izquierda de Angelito Di María tenía a varios esperando para convertir el tercero. Finalmente fue Safwan Mbae quien la metió en contra de su valla y puso las cosas 3-0. Y a los 52´ nuevamente Di María se calzó el traje de pasador y aprovechó las facilidades que le dio la defensa visitante, para ubicar con un centro rasante a Blaise Matuidi, quien pasó para el cuarto a los de Leonardo Jardim.
Marquinhos se dio el gusto a los 90´ de sellar el 5-0 definitivo, cuando encontró una pelota suelta dentro del área y libre de marcas definió la red ante el resignado De Sanctis.
París Saint Germain quiere la undécima corona y así convertirse en el más ganador del certamen (Olympique de Marsella también ostenta 10 títulos). Luego del rotundo fracaso europeo, la chance de un triplete local podría servir como un bálsamo para la primera experiencia de Unai Emery en el fútbol galo.
Angers derrotó 2-0 a Guingamp y vive sus horas más felices porque desde 1957 que no juega una final de copa. Un conjunto comandado por Stephane Moulin que aún no está a salvo de la amenaza del descenso pero que se dio el gusto grande de hacer historia.
Arrancaron con mayor decisión los bretones, con la movilidad de su centrodelantero Alexandre Mendy, quien puso en aprietos en 2 ocasiones al arquero local Alexandre Letellier.
Sin embargo, los del Loira aprovecharon la primera que tuvieron y abrieron el score en el minuto 38. Muy buena jugada de Jonathan Bamba por la derecha, quien desairó a un rival con un amague y se llevó la pelota hacia el área contraria. Esperó la llegada por el centro de Thomas Mangani, quien enganchó tuvo nervios de acero para hacer pasar de largo a un defensor y definir sin problemas ante el achique de Karl-Johan Johnsson.
En el minuto 88, Guingamp tuvo una gran oportunidad de empatarlo mediante un polémico penal. Mendy llegó hasta el fondo y envió un centro atrás que rebotó claramente en el pecho del capitán local Cheick Ndoye. El árbitro Benioit Millot juzgó que fue con la mano e indicó el manchón del penal. Jimmy Briand fue el encargado de la ejecución y la justicia llegó porque el remate fue devuelto por el poste derecho.
Con un equipo visitante jugado en ataque, Angers tuvo una contra letal y sentenció la historia en el minuto 92. Gran pase del croata Mateo Pavlovic para un solitario Karl Toko Ekambi. El camerunés tuvo tiempo de parar el balón y sacar un derechazo que valió el pase definitivo a la final.
En 1957 los del Loira estuvieron cerca de la gloria pero se encontraron con Toulouse, quien les encajó un tenístico 6-3 en su única final de copa disputada. En 2015 Angers regresó a la máxima categoría del fútbol francés tras 21 años en la Segunda División. Hoy se codea con un gigante y tiene ganas de hacer historia. ¿Quién le quita la ilusión a este pequeño?
(Foto Principal: Daily Mail / Afición Central)