El líder del torneo, quién increíblemente acaba de despedir a su entrenador, venció en uno de los clásicos de Río al Fluminense como visitante en el Maracaná por 0 – 2. Santos y Tiquinho anotaron los goles en la tarde de la fecha número 26 en la que el fogao dio un nuevo golpe sobre la mesa dejando en claro que su objetivo sigue en la mira. Quedan 12 partidos y la diferencia con su primer perseguidor es de 9 puntos.
No serán muchos los casos en la historia del fútbol en los que un equipo que sea líder de la competencia con amplia diferencia y se encuentre a una docena de partidos para cumplir el objetivo de ser campeón, haya despedido a su entrenador tras una serie de partidos donde no se consiguieron resultados. Es este el caso de Botafogo, que acaba de despedir a Bruno Lage luego de quedar eliminado en la semifinal de la Copa Sudamericana y no poder ganar durante cuatro fechas seguidas en el Brasileirao.
Vale aclarar que Lage estuvo solo 3 meses en su cargo, porque Botafogo comenzó la competencia bajo la dirección técnica de Luis Castro, pero al portugués le llegó una oferta irrechazable por parte del fútbol árabe cuando iban ocho fechas disputadas y su equipo ya era el puntero indiscutido. Un año realmente increíble para los blanquinegros, que en pocos días presentaran a su tercer técnico en la misma temporada en las que han estado desde el primer día en el primer puesto de la tabla.
Con este panorama se presentó en el Maracaná para enfrentar a Fluminense, quién venía en alza por la clasificación histórica a la final de la Copa Libertadores en la semana. Este fue el gran motivo para la fiesta que los tricolores realizaron durante el comienzo de la tarde soleada en Río, pero la personalidad de los jugadores visitantes hizo que en tan sólo dos minutos se baje el martillo a su favor. Porque a los 20’ Santos quedó mano a mano con Fabio producto de una defensa muy mala por parte del Flu, el volante gambeteó al arquero y puso el 0 – 1.
A los 22’ apareció el goleador del campeonato, el gran Tiquinho Soares la pinchó por arriba en un nuevo mano a mano que Fluminense le propinó nuevamente al ataque de Botafogo. El punto débil del finalista de América está más que claro, porque el retroceso del equipo de Fernando Diniz deja mucho que desear y ayer volvió a quedar expuesto.
Estos tres puntos ponen al glorioso albinegro con 55 puntos y tras el empate de Bragantino la diferencia es de 9 unidades. Gremio, Palmeiras y Flamengo vienen detrás con 44 porotos. Serán 12 fechas para el infarto en donde buscarán el deseado título.
Redacción: Juan Bovone
Foto: Desdelaventana.com
