Algo a lo que está acostumbrado Boca es a sufrir ausencias en las fechas FIFA y justo cerca del final del torneo esto le provocó muchas bajas, más algunas lesiones. Ante esto a Hugo Ibarra no le quedó otra opción de llevar a Mendoza un plantel lleno de juveniles, que ante Godoy Cruz deberán demostrar que están listo para dar el salto.
Antes que nada debemos aclarar porque los jugadores que tiene Boca en Mendoza son en su mayoría formados en las inferiores del club. Recordemos que el Xeneize cuenta en el plantel con algunos jugadores que con frecuencia son convocados por su seleccionado, como en el caso de Luis Advíncula y Carlos Zambrano, que juegan para Perú, y Frank Fabra, que fue citado por Colombia. Pero la presencia de los pibes también se deben a la cantidad de lesionados que cuenta el plantel, ya hace un tiempo está fuera Exequiel Zeballos y Sebastián Villa, a quienes ahora se le sumaron Darío Benedetto y Norberto Briasco, quedando así pocas opciones en el ataque. En el fondo de la cancha además de los citados por su selección, se suman la baja de Nicolás Figal y se esperará hasta último momento a Marcos Rojo, que tiene una sobrecarga muscular.
Con este panorama no le quedó otra opción a Ibarra que acudir a muchos chicos de la Reserva y a varios de los que ya estaban entrenando con la Primera, pero que no tenían muchos minutos en cancha. La defensa de hoy podría estar conformada por puros canteranos, Marcelo Weigandt, Facundo Roncaglia, Gabriel Aranda y Agustín Sández. En el medio campo estarán lo ya conocidos Pol Fernández y Alan Varela, quienes ya tiene experiencia pero que también salieron de las inferiores del club, y por último la delantera, que estará conformada por Luca Langoni y Luis Vázquez, que hasta no hace mucho eran parte de la Reserva.
Posible formación: Agustín Rossi; Marcelo Weigandt, Facundo Roncaglia, Gabriel Aranda o Marcos Rojo y Agustín Sández; Pol Fernández, Alan Varela y Oscar Romero; Luca Langoni y Luis Vázquez.
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