AU-NZ 2023

Una historia con golpes durísimos y épicas hermosas

MUNDIAL NUEVA ZELANDA-AUSTRALIA 2023
Informe Especial

LA SELECCIÓN ARGENTINA DE FÚTBOL FEMENINO PARTICIPARÁ POR CUARTA VEZ DEL EVENTO MÁXIMO DE LA DISCPLINA Y EN EL RINCÓN TE CONTAMOS CÓMO FUERON LAS TRES EXPERIENCIAS PREVIAS Y ADEMÁS TE DAREMOS UNA “YAPA”. SUMERGITE EN LA HISTORIA DE LA ALBICELESTE EN MUNDIALES CON NOSOTROS.

“VIEJO CONOCIDO”. Japón es un usual rival argentino, pero esta vez, no lo será en primera ronda. (El Femenino)

ESTADOS UNIDOS 2003
El debut de la “celeste y blanca” en la Copa del Mundo, fue el sábado 20 de septiembre aunque, tristemente para las nuestras, la aparición nacional trajo consigo una dolorosa goleada de Japón por 6 a 0. El escenario fue el “Columbus Crew Stadium”. El entrenador argentino era Carlos Borrello (mismo de todas las participaciones) y las niponas dieron cuenta de su superioridad tanto física como estratégica y psicológica: Argentina nunca encontró cómo frenar a su rival y el resultado pudo ser, incluso, más abultado.

La pesadilla en el Grupo C arrancó a los trece con un tanto de Homare Sawa, quien repetiría a los 38. En el segundo acto Emi Yamamoto amplió distancias en 19 de juego y luego un hat-trick de Mio Otani (27′, 30′ y 40′) sentenciaron la suerte albiceleste en el inicio.
La segunda participación fue algo más decorosa, es cierto, pero igual o más dolorosa ya que significaba decir adiós al mundial: fue caída por 3 a 0 frente a Canadá en el mismo escenario. Las conquistas canadienses fueron de Charmaine Hooper (19’PT) y Christine Latham (34′ y 37’ST).
El duelo final tuvo como escenario el “RFK Stadium” y de rival a Alemania quien sería, a la postre, campeón del certamen y las bávaras no tuvieron piedad de las nuestras y se impusieron por 6 a 1. Maren Meinert (3′ y 43’PT), Bettina Wiegmann (24’PT), Birgit Prinz (32’PT), Conny Pohlers (44´ST) y Martina Mueller (47’ST) fueron las “killers” de aquel encuentro del sábado 27 de semptiembre. El 4-1 parcial y primer gol argentino en mundiales, lo marcó Yanina Gaitán a los 26 de la segunda mitad.

Argentina se iba del torneo con tres caídas, 15 goles en contra, 1 a favor y sin haber sumado puntos, pero la historia recién empezaba a escribirse y por más que surgieran más tropiezos y sinsabores, si algo se sabe de la “celeste y blanca” es que siempre se vuelve a poner de pie.

CHINA 2007
Luego de ganar la Copa América 2006 y arrebatarle el título a Brasil, las argentinas regresan a la competencia mundial en el Estadio “Shangai Hongkou” el 10 de septiembre, pero el primer encuentro de esta segunda participación, realmente pone la situación en perspectiva y da un tremendo cachetazo: el rival en el debut fue el elenco alemán y la estrepitosa caída fue por 11 a 0. Melanie Behringer (12′ y 24’PT), Kerstin Garefrekes (17’PT), Birgit Prinz (29′, 46’PT y 14’ST), Renate Lingor (6′ y 46’ST) y Sandra Smisek (12′, 25′ y 34’ST) fueron quienes asestaron los sendos golpazos a Argentina, dejando un equipo al borde del KO. Alemania se convertiría en bicampeón del mundo.

Con bastante más recato y demostrando mucho carácter para recuperarse de la paliza inicial, las nuestras se midieron a Japón perdiendo por la mínima debido al tanto de Yuki Nagasato a los 46 del período final.

El cierre de esta segunda aparición mundialista otra vez fue con goleada en contra y ante un rival siempre significativo, como lo es Inglaterra. La apertura fue con un tanto en contra de Eva González a los nueve de juego, mas las inglesas aprovecharon el desconcierto y un minuto más tarde ampliaron la distancia gracias a Jill Scott. En la segunda mitad quien marcó en favor de “the lionesess” fue Fara Williams, pero González pudo modificar un poco el mal sabor de boca, descontando a los 15. Kelly Smith (19′ y 32’ST) y Vicky Exley (45’ST) terminaron por darle forma a la goleada y despidieron a Argentina con un rendimiento muy por debajo de lo esperado.

“2007”. Campeonas de América que no lograron dar el salto. (Wikimedia)

FRANCIA 2019
Doce años demoró en llegar la tercera oportunidad para Argetina y esta vez, aunque el entrenador seguía siendo el mismo, la camada de jugadoras demostró que se puede exigir más, sobre todo si se prentenden mejores resultados. No porque las selecciones anteriores no pudieran alzar la voz, sino porque el contexto, por primera vez en la historia, era adecuado para que en esta ocasión fueran escuchadas.

El pasaje al mundial galo se ganó luego de vencer en un repechaje a la selección de Panamá, después de obtener el cuarto puesto en la Copa América de Chile 2018. El contexto y la pésima situación administrativa y dirigencial que atravesaba nuestro equipo nacional por aquella época, es tema de otro informe, pero para dar un panorama, podemos decir que Argentina ni siquiera contaba con indumentaria apropiada ni lugar para entrenar. Con prácticamente todo en contra, pero a favor el amor propio y las ganas de mejorar y salir adelante, la “albiceleste” se ganó la chance del repechaje, concretado su ida al mundial derrotando a las panameñas por 4 a 0 en la ida disputada en la cancha de Arsenal de Sarandí y empatando 1 a 1 en su visita a tierras centroamericanas.

El grupo que tocó en suerte en la cita gala fue el D y allí nos esperaban dos viejos conocidos y un nuevo rival: Japón, Inglaterra y Escocia.
El cotejo debut terminó 0-0 ante el subcampeón vigente ya que las niponas fueron segundas en 2015 y en 2011 habían sido campeonas. No era para sencillo plantarse ante las asiáticas, mas Argentina supo hacerlo, aunque con un planteo demasiado defensivo que, luego del mundial, traería algunas consecuencias nada gratas de las que hanblaremos, muy brevemente, sobre el final del informe. El empate provocó que la celeste y blanca sumara su primer punto mundialista de la historia. Parece poco, pero teniendo en cuenta todo lo que sucedía alrededor, deberíamos entender que ese único punto, resultó ser, a la larga, un grito de batalla.

La segunda jornada de actividad midió a las nuestras con Inglaterra y las europeas se llevaron el triunfo por la mínima diferencia. El gol lo anotó Jodie Lee Taylor a los 16 del complemento.

El cierre de la fase grupal traía la oportunidad de, quizás, pasar a octavos de final. No se dependía solamente de resultados propios y Argentina debía ganarle a Escocia y esperar lo que sucediera con el encuentro entre japonesas e inglesas. Clasificaban 1° y 2°, más los cuatro mejores terceros.

Las cosas contra las escocesas no pudieron ser más épicas: ellas se pusieron 3 a 0 con tantos de Kim Little (18’PT), Jennifer Beattie (3’ST) y Erin Cuthbert (23’ST), pero el temple de este plantel salió a relucir y el cuento no quedó en esa estadística. Sobre los 28 Milagros Menéndez marcó el 1-3. A los 33, luego de un disparo tremendo de Florencia Bonsegundo que se desvió en la arquera rival Lee Alexander, se dibujó el 2-3 y a los 48, de penal, la “Bonse” gritó el 3-3 que permitía a Argentina soñar, pero que más allá de lo que fuera a suceder, dejaba asentado que esta selección quería más y mejores condiciones.

Finalmente los resultados necesarios no se dieron y Argentina no logró entrar a octavos de final, pero esta generación marcó un antes y un después, tratando de allanar el camino para las nuevas futbolistas que pretendan ser parte de la selección. Algunas jugadoras, como Estefanía Banini, uno de los emblemas más importantes que posee nuestro combinado nacional, expresó su descontento hacia el planteo táctico del entonces entrenador Carlos Borrello y en vez de analizar los pedidos y reclamos de las jugadoras, en voz de Banini, se decidió apartarla (junto a otras referentes) y no volver a convocarla para vestir la celeste y blanca.

Debieron pasar tres años para poder ver a “Estefi” nuevamente con la selección, pero la espera y la lucha empezaron a rendir frutos y hoy las condiciones del plantel femenino, son muchísimo mejores que las que tenán en la época de Francia 2019. Queda un montón por corregir, eso es innegable, pero el camino se recorre de un paso a la vez.

El mundial de “Nueva Zelanda y Australia 2023” tendrá mucha más visibilización y se cree, por lo vendido hasta el momento, que será el más importante desde lo económico, al menos. Su difusión, en términos generales, ha sido más amplia y gente que antes “no miraba a las chicas”, hoy entiende que su calidad futbolística es enorme y que, como espectáculo, el fútbol femenino, no deja deudas.

A modo de nota de color, te contamos que en 1971 se jugó un mundial NO OFICIAL, es decir no reconocido por FIFA como tal, pero en aquella ocasión Argentina venció 4 a 1 a Inglaterra en el Estadio Azteca ante alredor de 110.000 espectadores. Elba Selva fue la autora del póker aquel 21 de agosto y es justamente en conmemoración a este encuentro que cada 21 de agosto se celebra, en nuestro país, el “Día de la Futbolista Argentina”.

Quedará esperar para conocer la fortuna de Argentina y de su tránsito por este torneo. La historia comenzará en “Eden Park”, ciudad de Auckland Road, el lunes 24 de julio, a las 3 de la mañana, hora de nuestro país, frente a Italia. Seguirá el jueves 27 a las 21 contra Sudáfrica en “Forsyth Barr”, campo de fútbol de la ciudad de 66 y cerrará midiéndonos con Suecia el día miércoles 2 de agosto, a las cuatro de la mañana con el Estadio Waikato (Hamilton) como escenario.

Lo único que podemos decir desde aquí es VAMOS, ARGENTINA. Siempre con ustedes.

FOTOS:
Infobae
El Femenino
Wikimedia

Maru Burak

Nací un lluvioso lunes 12 de julio de 1982 y según mi DNI me llamo María Clarisa Burak, pero soy simplemente Maru. En 2005 dejé mi natal Provincia de Buenos Aires y me vine a Córdoba, donde resido desde entonces.
Por hobbie hago música, canto e intento bailar, pero mi vocación es, fue y siempre será el periodismo.
Me sumé a "El Rincón del Fútbol" en febrero de 2017 y espero mantenerme acá mucho, pero mucho tiempo: no es usual encontrarse a una manga de loquitos igual de fanáticos que yo. Aunque todos los deportes me atraen, el fútbol tiene ese no se qué, ese encanto que me aprisiona.
En El Rincón cubro "Le Championnat", es decir la Liga de Primera División de Francia y a la Selección Argentina, tanto en masculino como en femenino. También me sumo al grupo de Champions y Europa League, porque Schiavi no puede solo con todo...

Deseo que el futuro me encuentre dedicada a mi vocación y que pueda desarrollarla con criterio y profesionalismo.
Soy MESSIsta, BANINIsta, fan de Aldana Cometti, soñadora e ideologista, del deporte y de la vida.
Sólo resta decir... ¡Pero qué viva el fútbol!

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