El barco aldosivista partió en diciembre del 2014, desde el corazón del puerto de Mar del Plata, en un viaje inolvidable, a disputar la Primera División. El 2016, un mar turbulento, despidió a un gran comandante como Fernando Quiroz y dio paso al nuevo capitán que tendrá la ardua tarea de mantener la embarcación en el lugar que se ganó.
Aldosivi de Mar del Plata está atravesando el momento deportivo más exitoso de su historia, siempre teniendo en cuenta que está jugando en la máxima categoría del fútbol argentino. Con momentos inolvidables, le ganó a la mayoría de los grandes y estuvo a un paso de entrar a la anterior Copa Sudamericana.
Si el Tiburón quiere seguir escribiendo en las páginas doradas del fútbol argentino, debe luchar partido a partido y mejorar lo realizado durante todo el 2016, ya que fue el quinto equipo que menos puntos sumó, con 30 unidades.
El flojo año y sobre todo el rendimiento de los primeros 8 partidos de la temporada 2016/2017 borró de un plumazo a Fernando Teté Quiroz, nada más y nada menos que el técnico que los llevó a la cima de la gloria, rescatándolo de los infiernos del Nacional B en las últimas posiciones para subirlo a Primera no hace tanto tiempo.
Pero en este fútbol eléctrico, asemejado si se quiere al minuto a minuto de la TV, cada partido, cada punto, juega y en definitiva es lo que te marca el presente, dejando en un último plano a los contratos firmados o logros “pasados”.
En 8 partidos en el semestre, Quiroz sólo pudo conseguir 1 sólo triunfo como local ante Talleres de Córdoba, 3 empates y 4 derrotas. Por este motivo, sumado a la falta de respuesta del equipo, la dirigencia le exigió que dé un paso al costado.
En menos de 24 hs era presentado como nuevo DT de Aldosivi un viejo conocido, un “loco lindo” para muchos hinchas de Aldosivi ya que los salvó del descenso años atrás en el Nacional B, se trata de Darío Franco.
Darío Franco tiene un estilo marcado y aventurado si se quiere, muy distinto al que normalmente utilizan los equipos que buscan salvarse del descenso.
Posesión de pelota, salida por abajo, fluidez, movilidad, juego asociado, verticalidad y ataque, son los pilares innegociables de este entrenador, tanto de local como de visitante.
El Tiburón pasó de jugar con un 4-2-3-1 a un 4-3-3 y 3-4-3, intentando plasmar en el campo de juego todo lo anteriormente mencionado.
El debut de Darío Franco fue con un magro empate frente a Defensa y Justicia, seguido a eso una derrota frente a Quilmes. En los siguientes 3 partidos se vio un Aldosivi más fluido, con mayor proyección en ataque y solidez defensiva pero poco fino en los últimos metros, empatando contra Vélez, Tigre y Patronato para luego sí en la última fecha del semestre respirar una gran bocanada de aire fresco, llegar a una categórica victoria ante un rival directo como Sarmiento por 2 a 0 y en condición de visitante.
Aldosivi fue mucho para Sarmiento en todos los sentidos; la idea de juego de Darío Franco de la que venimos hablando en esta nota, se reflejó en cada sector del campo.
Los de Mar del Plata cerraron el semestre en la posición 26, con 13 puntos en 14 partidos jugados.
Si hablamos de la tabla que realmente le importa a la institución, se finalizó en la posición 22, arriba de Vélez, Quilmes, Arsenal, Huracán, Olimpo, Sarmiento, Temperley y Rafaela.
Ahora, el DT debe pensar en lo que se viene, en la pretemporada y en los que se van. Si bien es pronto, se sabe que Franco busca un 5 y un carrilero por derecha para reforzar el plantel. También es sabido que abandonan el club: Correa, Dinneno, Miracco y podrían irse Penco -que siente no ser prioridad para el DT- y Gastón Díaz -por problemas familiares-.
