Los holandeses consiguieron importantes triunfos que invitan a soñar con la fase de grupos. Benfica sufrió una tragedia griega en casa y el fantasma de Bela Gutman los dejó más que “suplicantes”.
Ajax venció 3-1 a Dinamo Kiev de Ucrania en el Johan Cruyff Arena y sacó una buena ventaja de cara a la revancha, para allanar el camino a la clasificación para la próxima instancia.
Apenas 2 minutos le tomó inaugurar el marcador al local, luego de un grosero error del arquero Denis Boyko. Dony van de Beek recibió en el área chica un pase de Dusan Tadic y ensayó un remate casi cayéndose. La pelota no llevaba demasiada potencia pero el guardavallas ucraniano se las ingenió para que se le escurriese por debajo de su cuerpo y traspasara la línea de gol en cámara lenta, de manera dramática.
Los visitantes usaron la cabeza y tuvieron su cuarto de hora, para equilibrar la balanza a los 15´. El húngaro Tamas Kadar ganó de cabeza tras un tiro de esquina y el portero camerunés Andre Onana salvó de manera providencial. El rebote corto le quedó al otro marcador central que incursionó en ataque, el polaco Tomasz Kedziora, quien solamente tuvo que empujarla para empardar el juego.
Ajax recuperó la ventaja a los 35´, con un gol cargado de fortuna. El marroquí Hakim Ziyech se animó con un remate desde afuera del área y la caprichosa fue más ídem que nunca, ya que se desvió en el camino en la cabeza de Kadar y dejó como estatua al arquero Boyko.
La tranquilidad llegó en el minuto 43, con un perfecto envío desde la izquierda por parte de Nicolás Tagliafico para el anticipo del serbio Dusan Tadic: 3-1 y partido liquidado de manera temprana.
Pudo ser goleada con un cabezazo de Klaas-Jan Huntelaar que dio en el horizontal. Pero a los de Erik ten Hag les queda la sensación que si mantienen el nivel de juego exhibido a lo largo del inicio de temporada, su lugar en la fase de grupos estará asegurado.
En un final para el infarto, PSV Eindhoven se impuso 3-2 a BATE Borisov en Bielorrusia y se trajo un valioso triunfo que inspira confianza. En el último minuto se iluminó el equipo de la Phillips y sacó adelante un partido complicado en un escenario más que difícil.
Los locales se adelantaron en el marcador por intermedio del finlandés Jasse Tuominen, en el minuto 9. Sin embargo, los holandeses le pusieron sangre latina y corrigieron el rumbo, cortesía del uruguayo Gastón Pereiro de penal (35´) y del mexicano Hirving “Chucky” Lozano (61´).
El veteranísimo Alexander Hbleb – 37 abriles, ex Arsenal y Barcelona – estableció la paridad a los 88´, pero apenas 1 minuto le duró la alegría a los anfitriones, ya que Donyell Maden puso cifras definitivas para el conjunto que dirige Mark van Bommel.
Benfica no aprovechó la localía y debió conformarse con un empate 1-1 frente al PAOK Tesalónica de Grecia. En Lisboa se ve que no leyeron a Antonio Tabucchi, porque no “Sostiene Pereira” ni mucho menos la ventaja ante un equipo heleno que ya se cargó al Spartak moscovita y que quiere escribir su mejor novela en la historia de la UEFA Champions League.
Los lusos golpearon desde los 12 pasos, en la última jugada del primer capítulo. Luis Miguel Afonso Fernandes – mejor conocido como Pizzi – no le pegó nada suave y consiguió el 1-0 parcial.
A 15 minutos del epílogo, la pelota parada cotizó en bolsa y los griegos alcanzaron el empate. El caboverdeano Fernando Varela ganó en las alturas pero su cabezazo se estrelló en el travesaño. Faraónica definición del egipcio Amr Warda, quien capturó el rebote y batió al arquero alemán Odisseas Vlachodimos (sí, la paradoja es que el portero tiene origen heleno).
Estrella Roja de Belgrado y RB Salzburgo jugaron en silencio y dejaron ídem al marcador, tras empatar 0-0 en el Stadion Rajko Mitic. Los cánticos racistas en la fase anterior frente al Suduva lituano tuvieron sus consecuencias y los serbios fueron castigados por la UEFA: 2 partidos a puertas cerradas.
Los balcánicos elevaron a 22 el número de encuentros oficiales sin perder en casa (18 triunfos y 4 igualdades). La última caída se remonta a octubre de 2017, cuando fueron derrotados por Arsenal en la Europa League (1-0, gol de Olivier Giroud). Por su parte, los austriacos enlazan 7 juegos sin caídas (llevaban 6 halagos en fila).
No fue magiar lo de AEK Atenas, que le ganó 2-1 al Videoton húngaro en Budapest y acaricia la clasificación. Los locales tuvieron su rato de locura en el minuto 22, cuando se quedaron con uno menos por la expulsión de Szbolcs Huszti.
Fue entonces que los de Marinos Ouzounidis golpearon 2 veces y se pusieron arriba en el score, cortesía de Viktor Klonaridis (34´) y de Anastasios Bakasetas (49´).
El propio Bakasetas igualó la cantidad de protagonistas en el terreno de juego, ya que se fue expulsado a los 53´ y eso posibilitó la reacción húngara. Descuento a los 67´ por intermedio de Danko Lazovic pero fue apenas un consuelo que maquilló una derrota merecida.
Young Boys de Suiza y Dinamo Zagreb de Croacia empataron 1-1 en Berna, resultado que le cayó mejor al equipo que comanda Nenad Bjelica. Los helvéticos se adelantaron enseguida gracias a un tanto de Kevin Mbabu a los 2 minutos de partido.
Sin embargo, los balcánicos no se amedrentaron y dejaron el tanteador en tablas a los 39´, por anotación de Mislav Orsic. Los suizos interrumpieron una serie de 6 triunfos en fila jugando como locales, mientras que los croatas elevaron a 5 el número de encuentros europeos sin perder fuera de casa.
(Foto Principal: BBC)
