La “Vecchia Signora” se puso al día con un triunfo que lo ayuda a estirar a 4 la ventaja sobre Napoli. Otro gol de Gonzalo Higuaín, que suma 14 en el certamen y quiere llevar su buen momento a la Selección.
Juventus derrotó 2-0 a Atalanta en el Allianz Stadium y mantiene el paso arrollador en la Serie A, donde se consolida como puntero (acumula 12 éxitos en fila). El pronunciado bajón de Napoli y el ritmo ganador que imponen los de Massimiliano Allegri parecen despejar el camino juventino hacia la séptimo corona consecutiva.
Se completó el postergado del Girone 26, que había sido suspendido por la intensa nevada caída en Turín y el “Bianconero” volvió a demostrar carácter y contundencia.
A los 20´ casi se quiebra el cero de no ser por una espectacular salvada de José Luis Palomino. Un tiro de esquina de Miralem Pjanic desde la derecha le quedó servido a Blaise Matuidi para el disparo. El galo metió un tremendo remate que fue interceptado por el ex defensor de San Lorenzo de Almagro y enviado al córner in extremis.
Pero antes de la media hora de juego, Juventus presionó y consiguió ponerse en ventaja. La velocidad de Douglas Costa originó un contraataque letal, con una habilitación del brasileño hacia Gonzalo Higuaín por derecha.
“Pipita” encaró como un wing de los de antes y se fue cerrando hacia el centro. Definió con un derechazo cruzado ante el achique de Etrit Berisha y a cobrar.
Muy poco peso ofensivo por parte de los bergamascos, que casi ni patearon al arco en 45 minutos. No se parece demasiado al equipo que deslumbró con su buen fútbol la temporada pasada: afuera de la Europa League y de la Coppa Italia, y octavo en el presente torneo.
El monólogo juventino se extendió en la etapa final. Sin ser demasiado punzante, la squadra local se las arregló para congelar el ritmo del partido con la convicción que en algún momento podría darle el tiro de gracia a su oponente.
Douglas Costa volvió con su vértigo por las bandas y estuvo a punto de liquidar el pleito, con una escapada por derecha que culminó con un latigazo cruzado, apenas ancho.
Pjanic aportó su habitual destello de calidad con un fino remate a colocar desde la puerta del área, pero la pelota salió por encima del horizontal. Sin dudas, el segundo gol estaba al caer.
A los 79´, Atalanta terminó de colocarse solito la tapa del féretro, ya que Gianluca Mancini lo cometió una falta a Giorgio Chiellini y se ganó la segunda tarjeta amarilla. Dos minutos más tarde, Juventus cerró el partido.
Dybala en la izquierda controló de manera magistral un largo envío desde el fondo. La “Joya” sintonizó la “FM Albiceleste” y buscó a Higuaín dentro del área. “Pipita” volvió a calzarse el traje de pasador y vio mejor perfilado a Matuidi, quien en absoluta soledad no tuvo problemas para batir a Berisha. Gol y partido terminado.
Si aparecen piedras en el camino, los de Allegri no tienen problemas para removerlas. Puede que se complique el sprint final si se avanza en la UCL, pero este equipo demostró que tiene la motivación intacta para seguir en la ruta ganadora. Es que la vara quedó en lo más alto y este grupo de jugadores quiere ser protagonista en cualquier competición que dispute.
La banda británica Morcheeba decía en el año 2000 que “Roma no se construyó en un día”. Bueno, la mística de Juventus, tampoco. Sabemos que el Imperio Romano terminó por derrumbarse… pero a la “Vecchia Signora” todavía no hay quien la derribe.
(Foto: Football Premium)