El campeón reaccionó en la bella ciudad de Florencia y se subió a la cima de manera transitoria. Atalanta recuperó su deidad futbolera, mientras que Bologna y Genoa repartieron puntos en Emilia-Romaña.
No hay tiempo que perder en Italia, porque es una semana a puro fútbol. Ayer terminó la cuarta jornada y ya se puso en marcha el girone 5 de la Serie A.
En el Artemio Franchi, Inter dio cuenta de Fiorentina por 3-1 y es líder momentáneo. Prueba de carácter para el “Nerazzurro”, que pudo capear el temporal en un escenario complicado.
Es que la squadra viola jugó mejor en el primer tiempo y se fue merecidamente al descanso en ventaja. Minuto 23 y un buen desborde de Nicolás González terminó en un preciso pase rasante para la llegada de Riccardo Sottil.
Todo marchaba bien para la “Fiore” hasta que el vigente campeón despertó de su letargo y en 3 minutos dio vuelta el marcador. A los 52´, Matteo Darmian con un derechazo cruzado empardó el juego. Y 3 minutos más tarde, Edin Dzeko le puso la cabeza a un córner de Hakan Calhanoglu y 2-1 arriba la visita.
Los de Vincenzo Italiano perdieron definitivamente la compostura con una airada protesta de Nico González. El nacido en Escobar se escapaba en una contra y Andrea Bastoni lo agarró de la camiseta. Vehemente pedido de amonestación del ex Stuttgart para con el defensor italiano y amarilla por el gesto ampuloso. A Nico se le salió la cadena porque aplaudió de forma irónica al árbitro Michael Fabbri y se ganó la segunda amonestación. Era merecida la amarilla para Bastoni, pero la reacción de Nicolás González fue una verdadera chiquilinada.
Entonces Inter estuvo un poco más sereno y liquidó el pleito a 3 minutos del final. Roberto Gagliardini con el pase e Iván Perisic con la definición para el 3-1 definitivo.
Atalanta fue efectivo y derrotó 2-1 a Sassuolo, en el Gewiss Stadium de Bérgamo. Segundo halago en fila para los de Gian Piero Gasperini, que vuelven a enamorar con su buen fútbol.
Apenas 3 minutos de partido le tomó al anfitrión quebrar el cero. Envío de Ruslan Malinovsky desde la derecha y llegada de Robin Gosens por el segundo palo, para arrojarse con los pies hacia adelante y dejar la bola en el fondo de las mallas.
El raddoppio bergamasco llegó a los 37´, con una linda jugada colectiva. Arrancó Teun Koopmeinersy combinó con Duvan Zapata, quien buscó a Malinovsky. Devolución del ucraniano para el caleño, quien abrió para Davide Zappacosta en la derecha. Preciso latigazo rasante y 2-0 arriba el dueño de casa.
El “Verdinegro” (hoy un poco más blanco en su totalidad) descontó cuando de acababa la primera etapa, con un zurdazo lejano de Domenico Berardi que se clavó junto al vertical de la mano zurda de Juan Musso.
Atractivo duelo protagonizaron Bologna y Genoa, que terminó 2-2 en el Renato Dall´Ara. Un final para el infarto para 2 necesitados, a quienes no les vino nada mal el reparto de puntos.
Los “Felsinei” golpearon primero con un zurdazo del escocés Aaron Hickey desde afuera del área, en el minuto 49. La visita recogió el guante 6 minutos más tarde y lo empató con un cabezazo de Mattia Destro, luego de un centro de Domenico Criscito.
Bologna volvió a desnivelar a los 85´, con un penal que Marko Arnautovic cambió por gol tras un agarrón de Zinho Vandheusden sobre Nicola Sansone. Los “Grifoni” respondieron por la misma vía 4 minutos más tarde: Kevin Bonifazzi empujó a Yayah Kallon dentro del área y Criscito puso el 2-2 desde los 12 pasos.
El epílogo paralizó a los corazones emilianos con una atajada descomunal. Andreas Skov Olsen metió una cabezazo bombeado que fue devuelto por el travesaño. Le quedó justita para el frentazo a Roberto Soriano, quien se ató la servilleta al cuello. Sensacional tapada de Salvatore Sirigu, que a puro reflejo desvió ese cabezazo a quemarropa y sostuvo el empate en la última jugada del partido.
(Foto Principal: @Inter)
