Ante ex compañeros, viejas glorias y rodeado de su familia, Leandro Romagnoli disfrutó de su partido despedida el pasado sábado. “Fueron el corazón del equipo para ganar todo lo que hemos ganado”, agradeció el “Pipí”.
Sábado de reconocimiento y agradecimiento se vivió en el Nuevo Gasómetro en la despedida a Leandro Romagnoli. Bajo el lema “Adiós a un Cuervo”, los fanaticos de San Lorenzo pudieron despedir al ultimo gran idolo del CASLA, que seguramente formara parte de la galería de próceres azulgrana.
25 mil hinchas del Ciclón se acercaron al Pedro Bidegain para decirle adiós al Pipí, el jugador con mas títulos de la historia del CASLA, entre ellos la Copa Mercosur 2002, primer titulo internacional para los de Boedo, y la Copa Libertadores 2014. Como para no despedir a este icono del Bajo Flores.
Musicalización, murga, rock, y mucho entretenimiento formaron parte de la previa hasta que a las 17 hs Romagnoli ingreso a la cancha y un atronador “Olé, olé, olé, olé, Pipiii, Pipiii” estremeció el Nuevo Gasómetro.
De un lado Saja, Romeo, Acosta, Michelini, Gorosito, Paredes, Tuzzio, entre otros, con la conducción técnica de la dupla Ruggeri-Insua. Del otro Villalba, Ortigoza, Mercier, Kannemann, Piatti, Blandi, Mattos y algunos mas, con Bauza en el banco de suplentes.
El partido, obviamente, fue una excusa para despedir a Romagnoli, que jugo un tiempo para cada equipo. Se impuso el conjunto “Libertador de América” 8-7 y el Pipí marco dos goles.
Uno de los momentos de mayor emoción se dio cuando Romagnoli compartió equipo con su papa Atilio, que formo parte del Huracan campeón de 1973.
Para el final quedo el show de Vicentico, tras lo cual Romagnoli fue levantado en andas por los participantes de su despedida. Luego un video con palabras de su familiares y el mensaje del idolo al publico azulgrana donde agradeció “por haber venido y compartir este momento tan lindo con nosotros. Fueron siempre el corazón de este equipo para haber ganado todo lo que ganamos. Gracias por todo”.
La vuelta olímpica junto a su familia fue el broche de oro a una fiesta donde reinaron los recuerdos y la emoción. Romagnoli nunca se va a alejar del Ciclón. Imposible porque es sinonimo de San Lorenzo. El presente lo encuentra fuera de las canchas pero trabajando con la misma de pasión de siempre como manager. Los hinchas lo van a extrañar. Porque un diez con su talento no aparece todos los días. Pero el recuerdo de sus gambetas, de sus goles y de la gloria obtenida van a permanecer inalterables en la memoria de los cuervos.
Imagen destacada: Vamos Ciclon