El delantero del Fulham, que anotó los dos goles en el último amistoso ante Nigeria, es la pieza principal con la cual Serbia contará de cara a Rusia. Un repaso de su corta y prometedora carrera.
Toda selección tiene jugadores en los cuales deposita gran parte de sus esperanzas. A veces son figuras en sus clubes, otras veces muestran especialmente un gran rendimiento al representar a su país. Pero también existe un tercer caso, en donde se combinan los dos anteriores, y ahí se encuentra Aleksandar Mitrović. En él, Serbia concentra fuertes expectativas.
En el último amistoso que el seleccionado serbio disputó, ante Nigeria en Londres, Mitrović se llevó todos los flashes. Principalmente por marcar los dos goles en el triunfo 2-0 ante los africanos, pero también por su destacada actuación en general, que no sobresalió aún más porque el arquero Uzoho se lució con sus atajadas.
Celebración por la obtención de la Superliga Serbia con el Partizán (Foto: VN)
El delantero de 23 años nació en Smederevo, una pequeña ciudad industrial ubicada en el noreste de Serbia, a sólo 46 kilómetros de Belgrado, la capital del país. Justamente en Belgrado fue donde el joven Aleksandar inició su formación futbolística, más precisamente en el Partizán, uno de los clubes más grandes de la nación.
Pero no fue ahí donde se produjo su debut profesional, sino en la filial del Partizán: el Teleoptik, también de Belgrado, que militaba en la segunda división. Allí, en la temporada 2011-2012, llegó a anotar 7 goles en los 25 partidos que disputó, y su rendimiento hizo que el Partizán decidiera su retorno. De esa forma, en la temporada 2012-2013 hizo su presentación en la Superliga Serbia, en donde se consagró campeón con números destacados: 18 tantos en 42 encuentros.
Su actuación en el “Blanquinegro” no pasó desapercibida en Europa, y es por eso que la temporada siguiente emigró a Bélgica para jugar en el Anderlecht, quien pagó 5 millones de euros por su transferencia.
Mitrović con la camiseta del Anderlecht (Foto: BPI)
En la Primera División belga, Mitrović no frenó su marcha goleadora. En el “Violeta” gritó campeón en la liga de la temporada 2013-2014, logro que le permitió luego coronarse en la Supercopa de Bélgica de 2014, en donde anotó un tanto. Allí estuvo dos temporadas y registró un total de 44 goles en 90 partidos jugados, lo cual significó su mejor promedio de gol hasta el momento: aproximadamente uno cada dos partidos.
En el 2015 llegaría el mayor salto de calidad de su carrera tras ser transferido por 13 millones de libras esterlinas a uno de los grandes de Inglaterra: el Newcastle. Con la camiseta de las “Urracas” su rendimiento no fue el mejor, y sólo pudo marcar 17 goles en 72 citas. Si bien comenzó con el pie derecho, anotando varios goles en las primeras fechas que disputó, más tarde el flojo funcionamiento de su equipo no lo acompañó y su figura fue apagándose.
Aleksandar en Newcastle, club dueño de su ficha (Foto: Getty Images)
El ciclo de Mitrović en el club del noreste inglés se interrumpió en enero de este año, cuando fue cedido al Fulham, institución que milita en la Championship, segunda división de Inglaterra. El cambio pareció sentarle bien al serbio, ya que allí lleva anotados 8 tantos en tan sólo 11 partidos disputados. Impactante promedio.
Defendiendo los colores de Serbia, el joven delantero tiene un registro de 13 goles en 35 encuentros con el seleccionado mayor, en el cual debutó en el año 2013. Además, si se cuentan sus participaciones en los seleccionados Sub-19 y Sub-21, pueden sumarse 9 tantos más en otros 18 partidos.
Festejo de gol en su club actual, el Fulham (Foto: Getty Images)
Sin dudas que los números hablan muy bien de la capacidad de Mitrović, y avalan la fe que todo el pueblo serbio deposita en él de cara al cada vez más próximo Mundial, en donde se buscará hacer historia.
Imagen destacada: AFP/Getty Images