En un rendimiento irreconocible, el combinado de Paolo Montero dejó esta tarde una pésima imagen ante el audaz Banfield de Julio César Falcioni y terminó siendo vapuleado por 4 a 0 en el Gigante de Arroyito.
Si bien a priori se sabía de las virtudes de Banfield para el contragolpe, el visitante terminó concretando todo lo que propuso y así luego de algunos avances canallas, a los 20 minutos del primer tiempo Darío Cvitanich recibió un pelotazo al pecho para sacarse rápidamente de encima a su marcador Leguizamón, definir al palo izquierdo de Rodríguez y marcar la apertura del tanteador para el Taladro.
Sin tiempo para poder reaccionar, rápidamente en un avance de Nicolás Bertolo el propio Leguizamón se encargaba de cometerle penal para que nuevamente Cvitanich lo cambie por gol y vaya al entretiempo 2 a 0.
Para el segundo tiempo, Central quiso aumentar su presión pero terminó quedando algo largo y así fue que nuevamente la figura y capitán de Banfield se escapó por la izquierda tras chocar con Leguizamón y jugó hacia el medio para la llegada del zurdo Pablo Mouche, que señalaba el tercero y dejaba la sensación de partido liquidado.
Sin muchas ideas el equipo no pudo acercarse ni vencer la férrea defensa de la visita y nuevamente en un contragolpe fue Mauricio Sperduti quien terminó sellando el 4 a 0 final luego de un buen pase de Pablo Mouche de izquierda a derecha.
Con el resultado consumado, el público comenzó a pensar en el partido del miércoles por los octavos de final de la Copa Argentina ante Boca en Mendoza y da la sensación que el uruguayo Montero así lo entiende debido a que en la conferencia de prensa reconoció que se trata de “una situación límite” y que “el partido con Boca es una final”.
Foto: Rosario3.com
Informe: Leo Masciotra
