La “Vecchia Signora” recuperó su estirpe y volvió a levantar el trofeo luego de 3 ediciones. Título número 14 para el “Bianconero”, el más ganador del certamen.
Frente a frente la historia reciente ante la frescura y renovación, en una temporada atípica del fútbol italiano. Es que el reinado se acabó luego de 9 años y la Serie A se volvió de lo más apasionante. Pero quedaban motivos para brindar y se trataba de la última corona del año. En el MAPEI Stadium, Cittá del Tricolore (la casa de Sassuolo), Juventus se impuso 2-1 sobre Atalanta y se consagró campeón de la Coppa Italia.
Los bergamascos podían rubricar con un título el gran momento sostenido desde hace años y esta ocasión era inmejorable. Enfrente, la abatida “Juve” como esa longeva estrella de cine que ve bajar su nombre de la marquesina para darle lugar a nueva actriz. No solamente se acabó la hegemonía, sino que también está en peligro la participación en el mejor escenario de Europa.
Los de Gian Piero Gasperini salieron como una tromba marina desde el inicio. Duvan Zapata se mostró incontenible para la defensa juventina y sus desbordes por la izquierda fueron un verdadero dolor de cabeza.
Remo Freuler avisó con un derechazo cruzado que se fue muy ancho y luego el inoxidable Ginaluigi Buffon lo atoró a Zapata cuando el caleño le había ganado la posición a Matthijs De Ligt en el borde del área.
Las cosas que tiene el fútbol, porque en el mejor momento de Atalanta llegó el gol de Juventus (con algo de polémica, digamos todo). Minuto 31 y la “Dea” encabezaba un ataque con Matteo Pessina. Juan Guillermo Cuadrado se arrojó con los pies hacia adelante y cometió una evidente falta. El árbitro Davide Massa aplicó el “siga siga” y la réplica de la “Juve” fue inmediata. Dejan Kulusevski combinó con Cristiano Ronaldo la jugada se ensució en plena área chica. Weston McKennie la limpió hacia un costado para un inspirado Kulusevski, quien acarició la bola con el borde interno del pie zurdo y la ubicó con sutileza en el ángulo más lejano. Golazo del sueco y nuevo capítulo añadido a la inexorable “ley del ex”.
Los bergamascos merecían algo más y encontraron el empate 10 minutos más tarde. Error en la salida de Adrien Rabiot y contra iniciada por Hans Hateboer. El neerlandés por derecha mandó el centro atrás y Ruslan Malinovskiy hizo gala de su pegada con un tremendo zurdazo, para empardar las acciones.
Todo por decidir en la segunda etapa con una “Dea” más fortalecida en lo anímico y una “Vecchia Signora” agazapada a la espera de un golpe certero.
Precisamente el complemento fue totalmente diferente al primer tiempo. Juventus recuperó el fuego sagrado y Atalanta padeció el cansancio y la falta de ideas. Está claro que un equipo que domina la escena italiana durante 9 años, no se olvida de jugar al fútbol de la noche a la mañana. Y en 45 minutos demostró la maquinaria está lejos de oxidarse.
El preludio fue una genialidad entre Cristiano y Federico Chiesa. Envío de Kulusevski y CR7 tuvo ojos en la nuca porque con un delicioso taco lo dejó a Chiesa cara a cara con Pierluigi Gollini. Al hijo del gran Enrico le faltó suerte porque su derechazo a colocar se estrelló en el poste.
Y a los 73´ llegó el merecido desnivel para el “Bianconero”. Dejan Kulusevski con el pase frontal y Federico Chiesa pisó la tierra prometida casi sin oposición (falló Rafael Toloi en la cobertura). Esta vez, el extremo le apuntó al primer palo y metió la bola entre las piernas de un Gollini que anunció que iría hacia el otro costado. Ventaja recuperada para el que hizo más para ganarlo.
Atalanta sintió el impacto y no pudo recuperarse. Juventus mostró carácter e inteligencia y no se dejó amedrentar por la presión inicial de los bergamascos. Nadie le quitará el mote de gran equipo o nueva sensación al excelente trabajo de los dirigidos por Gian Piero Gasperini. Pero enfrente estaba el “gigante dormido” y era sabido que – herido en su orgullo – en un momento crucial iba a despertar.
Síntesis:
Juventus (2): Buffon; Cuadrado, De Ligt, Chiellini y Danilo; McKennie, Bentancur, Rabiot y Chiesa (Dybala); Kulusevski (Bonucci) y Cristiano Ronaldo. DT: Andrea Pirlo.
Atalanta (1): Gollini; Toloi (Djimsiti), Romero y Palomino; Hateboer (Ilicic), de Roon, Freuler, Gosens (Miranchuk), Pessina (Pasalic) y Malinovskiy (Muriel); Zapata. DT: Gian Piero Gasperini.
Goles: Kulusevski (31´) y Chiesa (73´) (JUV); Malinovskiy (41´) (ATA)
Árbitro: Davide Massa
(Foto Principal: @Pirlo_official)