Los bávaros jugaron al póker con los capitalinos y el sueño del décimo torneo doméstico al hilo está cada vez más cerca. Dortmund volvió a empatar y no puede descontarle al líder. Leverkusen aulló en casa ajena y continúa en el podio.
La 27:Spiel de la Bundesliga fue otro baño de realidad para los que siguen habitualmente al fútbol alemán. Bayern Münich aplastó 4-0 a Unión Berlín en el Allianz Arena y volvió a mostrarse como ese equipo dominador por sobre el resto de los mortales germanos.
Kingsley Coman calibró la mira a los 16´ y un tremendo disparo desde el borde del área abrió la cuenta para los de Julián Nagelsmann. Otro francés se encargó de ensanchar la brecha, 9 minutos más tarde, cuando Tanguy Nianzu dijo que sí con la cabeza a un tiro de esquina de Joshua Kimmich.
Se acababa la primera etapa y Robert Lewandowski se fue camino a la gloria para el tercero. El guardavallas Andreas Luth lo derribó y el polaco canjeó penal por gol para dejar el electrónico con diferencia de 3.
Apenas iniciado el segundo tiempo llegó el cuarto grito sagrado local. Jamal Musiala le dijo “tomá y hacelo” a Lewandowski y “Tito” selló su doblete y el tanto número 31 en el campeonato.
Borussia Dortmund igualó 1-1 ante Köln en su visita al Rhein Energie Stadion y volvió a quedar a 6 unidades de la cima. Los de Marco Rose se habían arrimado con el triunfo entre semana en el juego pendiente ante Mainz pero hoy no supieron mantener la ventaja y el margen de error es cada vez menor.
Marius Wolf abrió la cuenta a los 8´ luego de un quirúrgico pase de Jude Bellingham. Pero Die Geißböcke escalaron hacia el empate y lo consiguieron en el minuto 36, cortesía de Sebastián Andersson.
Bayer Leverkusen encontró la receta sobre el final y doblegó 2-0 a Wolfsburgo, en el Wolkswagen Arena. Agónico éxito para el equipo de la industria farmacéutica, que permanece en el tercer lugar de la tabla.
Un tardío doblete del brasileño Paulinho (86´ y 92´) confirmó el triunfo para los entrenados por el suizo Gerardo Seoane, que se quedaron afuera de la Europa League a manos de Atalanta.
Dos empates sin goles dejaron al rojo vivo la pelea por el cuarto puesto, que otorga el último boleto directo hacia la próxima Champions League. En el Red Bull Arena de la ciudad que formó parte de la ex República Democrática Alemana, RB Leipzig y Eintracht Frankfurt igualaron 0-0. Die Roten Bullen tienen 45 unidades y por ahora están cuartos por mejor diferencia de gol, mientras que Die Adler volaron alto en la Europa League y se verán las caras con Barcelona en los cuartos de final.
Friburgo no pudo con el colista Greuther Fürth y el marcador en silencio en el Sportpark Ronhof Thomas Sommer dejó a Die Geier en el quinto peldaño de la escalera continental (mismo 45 puntos que Leipzig aunque peor goal average).
Un duro revés sufrió Hoffenheim al caer 3-0 ante Hertha Berlín, en su excursión al Olympiastadion de la capital. Die Kraichgauer tampoco pudieron meterse en el cuarto puesto porque los de Félix Magath se impusieron por anotaciones de Niklas Stark (39´), Ishak Belfodil (63´) y Lucas Tousart (74´).
Mainz 05 fue contundente y le imprimió a Arminia Bielefeld un 4-0 en el Mewa Arena de la ciudad natal de Johannes Gutenberg. Vuelta al triunfo para Die Nullfünfer, que venían de 2 sinsabores en fila. Jonathan Burkhart dos veces (1´ y 75´, el segundo de penal), Moussa Niakhate de penal (65´) y Marcus Ingvartsen también desde los 12 pasos (79 ´9 convirtieron las dianas para el elenco del danés Bo Svensson.
En una verdadera final por la permanencia, Stuttgart se impuso 3-2 sobre Augsburgo y salió de la zona candente. Partidazo en el Mercedes Benz Arena, donde el dueño de casa estuvo 2 veces abajo en el marcador pero que pudo corregir el rumbo a 5 minutos del final.
André Hahn abrió la cuenta para la visita a los 6´ y Waldemar Anton estableció la paridad en el minuto 44. Die Fuggerstädter recuperaron la ventaja en la última jugada del primer tiempo y así se fueron al descanso.
Sin embargo, la reacción de Die Roten llegó por intermedio de Omar Marmoush (79´) y de Tiago Tomás (85´), para dejar a los del estadounidense Pellergino Matarazzo con la pasta de la salvación.
Bochum y Borussia Mönchengladbach no pudieron terminar su partido en el Vonovia Ruhrstadion por culpa de un estúpido. Ganaban Die Fohlen por 2-0 con goles de Alassane Plea y Breel Embolo hasta que un hincha no tuvo mejor idea que arrojarle un vaso de cerveza al asistente Christian Gittelman y el árbitro Benjamín Cortus decidió suspender el encuentro.
Por Emiliano Schiavi / @ejschiavi
(Foto Principal: @FCBayern)
