Franco Armani pasó por las oficinas del Monumental y firmó su nuevo contrato en el cual se aumenta la cláusula de rescisión.
Era el hombre elegido para ocupar el arco luego de la salida de Marcelo Barovero, pero la negativa de Atlético Nacional a venderlo fue rotunda y no hubo forma de mover la decisión de los colombianos, misma situación que se vivió hace un año, lo que terminó produciendo la llegada de Germán Lux. La historia cambió a fin de año del 2017, luego de que River quedara eliminado de la Copa Libertadores a manos de Lanús y obteniendo la Copa Argentina ante Atlético Tucumán, el deseo del propio Armani por ponerse el buzo de arquero del club del cual es hincha desde chico y que lo podía acercar a la Selección Argentina hizo que los Cafeteros acepten los 4 millones de dólares por el pase del arquero, quien firmó contrato hasta 2021 con una cláusula de rescisión de apenas 8 millones de dólares.
El ex Morón rebalsó las expectativas de propios y ajenos al mundo River ya que con 21 presentaciones logró terminar en 13 con la valla invicta, además de estar 620 minutos consecutivos sin recibir un gol, lo que le valió primero estar en la preselección de 35 jugadores y luego la confirmación de ser parte de los 23 jugadores que representarán a Argentina en Rusia comandados por Sampaoli, todo eso en seis meses.

Las buenas actuaciones del casildense despertaron dos cosas: el interés de clubes europeos y el alerta de los directivos de River Plate. Concientes de que la cifra de la cláusula de rescisión es baja para cualquier club del viejo continente, D’Onofrio y compañía pusieron manos a la obra con los representantes del guardameta para elevar dicha cláusula.
Antes de subir al avión que lo depositará en Barcelona junto a la selección para la preparación previa al Mundial de Rusia, Armani y D’Onofrio se reunieron en las oficinas del Monumental, donde el custodio del arco más grande firmó un nuevo contrato, extendido hasta 2022, con una mejora económica acordé al nivel y la nueva cláusula de salida, que esta vez será de 20 millones de dólares brutos, esto quiere decir que descontando los impuestos y el 15% que le corresponde al jugador, a River le quedarán 16 millones de dólares netos.

Aunque el mismo portero admitió que no está en sus planes abandonar el club ya que anhela ganar la Copa Libertadores y piensa quedarse mucho tiempo en la institución, ya no será tan fácil para quien deseé sus servicios utilizar la elevada cláusula de salida, que dicho sea de paso sólo puede utilizarse con el consentimiento del propio jugador.
Foto Principal: Prensa River