“The Heart” se saltó del pecho en la prórroga para latir con todo ante Adelaide y jugar su tercera definición consecutiva por el título. Enfrente no estará su acérrimo rival citadino sino que lo hará el hermano menor de Melbourne, porque Western United dio el golpe a domicilio y disputará su primera final.
Un viejo conocido y un novel pretendiente protagonizarán la denominada “Grand Final” de la A-League y decidirán quién se quedará con el título de la Primera División del Fútbol de Australia.
Melbourne City debió batallar hasta en el suplementario pero pudo deshacerse de Adelaide United, al imponerse 2-1 en el AAMI Park. El mejor de la fase regular – y vigente campeón australiano – había igualado sin goles ante los “Reds” en la primera semifinal disputada en el Coopers Stadium.
Y fue la visita la que golpeó primero a los 48´, cortesía de Zach Clough. Envío de Javi López desde la derecha y Clough se mandó una definición espectacular: control con la zurda y remate bombeado que cayó en el ángulo superior derecho de la valla defendida por Tom Glover. Un verdadero golazo.
Los “Cityzens” retomaron la calma en el minuto 74. Buen desborde y mejor centro de Andrew Nabbout desde la derecha para el perfecto anticipo ofensivo de cabeza de Marco Tilio.
Marcador en tablas y tiempo suplementario asegurado, aunque apenas iniciada la prórroga llegó el gol del triunfo para el conjunto que dirige Patrick Kisnorbo. A los 92´, buena combinación entre Connor Metcalfe y Jamie MacLaren, que terminó con un remate del primero que fue bloqueado por un defensa. Le cayó al infalible goleador de Sunbury y MacLaren se encargó de ajusticiar a Joe Gauci y meter a su equipo en la tercera final consecutiva.
Su rival será Western United, que sorprendió a Melbourne Victory con un contundente 4-1 en el mismo escenario del AAMI Park. Las “Big V” había ganado el primer chico por la mínima y se relamía por el regreso a una final luego de 4 temporadas.
Sin embargo, la franquicia que llegó hace 3 años dio el batacazo con un inesperado póker a domicilio y va por su sueño dorado (en su temporada estreno alcanzó las semifinales).
Eliminatoria igualada a los 18´ con una bola cruzada de Connor Pain para el cabezazo de Aleksandar Prijovic. Jake Brimmer hizo gala de su pegada y con un tiro libre empardó el score a los 37´ (y dejó el global 2-1 en favor del anfitrión).
EL “United” salió como una tromba para el segundo tiempo y fue contundente a la hora de corregir el rumbo. A los 49´, Dylan Wenzel-Halls metió un fantástico centro desde la derecha y Prijovic otra vez mostró su instinto goleador con un gran anticipo con la punta del botín derecho.
El delirio visitante llegó en el minuto 78´, con una genial descarga de Prijovic hacia atrás y el preciso derechazo a colocar de Lachlan Wales para el 3-1 parcial.
Jugado en ataque en busca del gol que forzara a la prórroga, el “Victory” murió con las botas puestas. Última jugada del partido y la réplica del “United” fue fulminante. Connor Pain se escapó al control de la defensa y levantó la cabeza. Solito y solo entró Wenzel-Halls por el medio y la empujó hacia la valla desguarnecida de un desesperado Iván Kelava. Impacto inesperado de Western United y gran oportunidad para su primera gran alegría.
Melbourne City va por su quinto anillo de campeón y así igualar a Sydney FC, por el momento el más ganador de Australia. El AAMI Park de la ciudad que fuese sede olímpica de los Juegos de 1956 será el escenario de este “last dance” al otro lado del mundo. La historia vs. la renovación, la experiencia frente a la frescura. Western United está invitado a la fiesta y quiere desandar su propio camino.
Por Emiliano Schiavi / @ejschiavi
(Foto Principal: @aleaguemen)
