Un par de golazos dejó el marcador en tablas en el primer “chico” entre el Madrid y los “Cityzens”. Al multicampeón europeo jamás hay que darlo por muerto y el equipo del momento lo sabe.
Se abrió el telón de semifinales de la UEFA Champions League con un duelo que tranquilamente podría tratarse de una final anticipada. En el Santiago Bernabeu, Real Madrid y Manchester City no se sacaron ventajas y empataron 1-1.
El de la mística copera, el que se siente cómodo en la competición que mejor le queda y que recientemente levantó el trofeo de Su Majestad. Con la liga casi en el bolsillo de su enemigo catalán de siempre pero con el objetivo de la “fiesta de 15” en la búsqueda de una nueva orejona.
Enfrente la criatura y su padre, el culto a la posesión y la chance para Pep Guardiola de matar 2 pájaros de un tiro: ganar una Champions con otro equipo que no sea ESE Barcelona y lograr que los “Cityzens” lo consigan por primera vez en su historia.
Lo bueno de esta clase de enfretamientos es que respetan a rajatabla la categoría de “partidazo”. Nunca defraudan, no se guardan nada y es la cita ideal para cualquier espectador neutral.
Por esas cosas del fútbol, en el mejor momento de uno aparece el gol del otro y viceversa (es lo lindo e impredecible de este deporte). Manchester City hizo trabajar a un muy seguro Thibaut Courtois con un par de atajadas sensacionales y cuando estaba al caer el grito sagrado de la visita, apareció la jerarquía de la “banda de Carleto“.
Minuto 36 y de costa a costa la llevó el Madrid sin que su rival siquiera tocase la pelota. El tiki tiki estuvo en la vereda de enfrente pero en el momento justo lo pasó a nafta para un ataque demoledor. De Eduardo Camavinga para Vinicius Jr. y el carioca le metió una bossa nova a su remate para alojar la bola en el ángulo superior derecho del arco defendido por Ederson. Pedazo de gol para Viny, que dice presente cuando más se lo necesita.
Courtois continuaba con su solvencia habitual bajo los 3 palos y la decepción de Erling Braut Haaland fue total porque tocó más veces la pelota el arquero Ederson que el propio delantero noruego.
Todo parecía bajo control hasta que un tanto de otro partido le echó un manto de justicia al marcador. A los 67´, Ilkay Gündogan descargó para Kevin De Bruyne y el belga calibró la mira para un derechazo colosal que dejó sin chances a su compatriota Courtois.
Serie abierta con final incierto. Los ingleses saben que si pasan este durísimo escollo tienen la oportunidad que esperaban para al fin concretar ese sueño esquivo. Claro que enfrente está el candidato de siempre, el que te liquida por presente y con el peso de la historia. Estambul está a un paso: depende de cada uno si se suben al tren de la ilusión o al “Expreso de Medianoche”.
Por Emiliano Schiavi / @ejschiavi
Síntesis:
Real Madrid (1): Courtois; Carvajal, Rüdiger, Alaba y Camavinga; Valverde, Kroos (Tchouameni), Modric (Nacho); Rodrygo (Asensio), Benzema y Vinicius Jr. DT: Carlo Ancelotti.
Manchester City (1): Ederson; Walker, Stones, Rubén Días y Akanji; Rodri, Gündogan, Bernardo Silva y De Bruyne; Grealish y Haaland. DT: Josep Guardiola.
Goles: Vinicius Jr. (36´) (RMA) y Kevin De Bruyne (67´) (MCI)
Árbitro: Artur Soares Días (Portugal)
(Foto Principal: @ChampionsLeague)
