En el día de ayer se informó la resolución por parte de la Conmebol, en donde sancionaron a jugadores y dirigentes que estuvieron presentes en el incidente de la Copa Libertadores ante Atlético Mineiro.
Los hinchas habían dejado atrás la eliminación que sufrió el equipos en la última edición de la Libertadores, en donde claramente Boca se vio perjudicado por algunas decisiones arbitrales y las cuales terminaron de sentenciar el despido del equipo de la competencia, por penales. Luego de la finalización del partido tanto jugadores y dirigentes Xeneizes se enfrentaron a la seguridad privada del club y a la fuerza policial de Brasil, terminando la noche en una comisaria de país vecino.
Luego de tremendo escandalo por parte del conjunto argentino, se esperaba que la Conmebol diera un duro veredicto, en donde sancionaría a las personas implicadas en este pelea y al club le pondría alguna multa elevada. Tuvieron que pasar un poco más de dos meses para que Boca supiera que inconvenientes le traería la pelea que generó luego del partido.
Lo que si está firme en la sanción es la ausencia de algunos jugadores y dirigentes. Para los integrantes del Consejo del Fútbol, Marcelo Delgado y Jorge Bermúdez, la suspensión es de tres partidos, mientras que Raúl Cascini no podrá ingresar a un estadio por seis encuentros. En los disturbios se vio a Sebastián Villa y Cristian Pavón tirando los bebederos, por lo que podrían estar suspendidos entre tres y seis enfrentamientos, algo similar para Marcos Rojo y Carlos Izquierdoz, quienes se agarraron a golpe de puños con la seguridad.
Para Diego González, Javier García y Carlos Zambrano la sanción es menor y podrían estar ausentes entre uno y cuatro partidos. Aclarando que esto corre para los encuentros de Copa Libertadores o la Copa Sudamericana.
Pero las malas noticias para Boca no terminan ahí, por supuesto que además de la suspensión de los jugadores el club deberá pagar una multa, que rondaría entre 250 mil y 500 mil dólares.
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