Los capitalinos cortaron la racha negativa de 3 caídas sucesivas y escalaron al cuarto puesto, en zona de Pre Champions. Doblete de Ciro Immobile, que se afirma como el “capocannoniere” de esta temporada con 21 tantos.
Lazio se impuso 2-0 a Hellas Verona en el Olímpico de la ciudad a la que conducen todos los caminos y cerró el Girone 25 del Calcio con una sonrisa. Se había desmoronado el equipo de Simone Inzaghi, porque cedía terreno a nivel doméstico y además tuvo un traspié europeo, en su visita a Bucarest.
La noche se presentaba ideal en la Ciudad Eterna, donde los laciales se propusieron de una vez por todas tomar impulso y regresar a la zona de élite continental. Enfrente el penúltimo de la tabla, que acumulaba 2 caídas en fila y que probablemente sea número puesto para el descenso.
Las diferencias entre ambos eran notorias (no era casual la posición de cada uno en el torneo), pero a los locales les faltó algo de inventiva para vulnerar el cerrojo defensivo propuesto por la squadra de Fabio Pecchia.
Quizás el atrevimiento del español Luis Alberto y la presencia del siempre temible Immobile en el ataque, eran las cartas mas importantes para desbloquear el resultado. De hecho Ciro no se quedó quieto y generó la primera chance de gol, cuando ingresó por la izquierda y enfrentó al arquero Nicolás. Pero el brasileño tapó su disparo y mantuvo el cero de su arco.
Volvió a insistir Immobile nuevamente por el callejón de la izquierda, pero esta vez el remate buscó el primer palo de Nicolás y la pelota dio en el lado incorrecto de la red.
Luis Alberto hizo gala de su pegada y se animó desde afuera de la 18, con un tiro que rebotó en el travesaño y el rebote fue cabeceado por Sergej Milinkovic-Savic, pero la caprichosa le cayó mansamente en las manos a un portero brasileño que no salía de su asombro.
Se fueron los 45 iniciales con el dominio romano y el quiebre de la resistencia de los helenos estaba al caer. Era cuestión de tiempo y Lazio en 5 minutos liquidó el pleito.
Condujo Luis Alberto a los 55´ y no tuvo resquicio alguno para meter un remate. Retrocedió con pelota dominada y buscó en profundidad Senad Lulic, pero en el camino detuvo la pelota Ciro Immobile. El delantero mostró su estirpe goleadora y sacó un latigazo bajo al primer palo, para el harto merecido 1-0 parcial.
Aceitó su maquinaria el equipo de Inzaghi y en una contra le dio la estocada final a su rival. Immobile corrió por la izquierda – realmente se sintió por ese costado como pez en el agua – y le cedió la pelota a Milinkovic-Savic, quien venía por el centro. Generoso, el serbio lo vio mejor ubicado a Marco Parolo y soltó el balón con un toque sutil. El volante italiano castigó a Nicolás, pero el brasileño usó su pie para negarle el gol. La pelota se elevó demasiado y quien se animó a cabecear fue Immobile, para sellar su doblete a la hora de partido.
Volvió la confianza para Lazio – aprovechó al máximo la chance de recuperarse frente a un limitado adversario – y consiguió la inyección anímica que necesitaba: para no perder posiciones hacia la próxima UCL y para revertir su futuro en la actual Europa League.
(Foto: SkySports)