Nada de “tragedia griega” en la ciudad de los amantes que imaginó William Shakespeare, como para enamorarse de un torneo continental para la próxima temporada. El “Toro Salvaje” noqueó a Udinese y se aleja de los problemas.
Punto final para el capítulo 13 en el fútbol de Italia y los locales festejaron sendos triunfos. En el Marc Antonio Bentegodi, Hellas Verona derrotó 2-1 a Empoli. Quinto halago en fila para los “Griegos” jugando como locales, que se acomodaron en el noveno puesto y encienden la llama de la ilusión europea.
Un primer tiempo sin goles pero con la chance más clara a favor de la visita. Un lejano disparo del escocés Liam Henderson que fue devuelto por el travesaño, cuando el guardavallas Lorenzo Montipó ya estaba vencido.
Se abrió el arco al inicio del complemento, con un preciso centro de Darko Lazovic desde la izquierda y el cabezazo de pique al suelo de Antonin Barak para desbloquear el marcador.
La respuesta de los toscanos llegó a los 67´, con un error defensivo que se pagó caro. Un centro a la olla desde la izquierda y Andrea Pinamonti la bajó de cabeza al segundo palo. Federico Ceccherini hizo todo mal: primero porque habilitó a los rivales y segundo con una artera pifia que se transformó en un pase para que Simone Romagnoli la empujase al gol.
Envalentonado por el empate, el conjunto de Aurelio Andreazzoli estuvo más cerca del segundo, pero el fútbol tiene esas cosas y sobre la hora el dueño de casa se quedó con la victoria.
Primer minuto de tiempo adicional y Barak abrió juego con Adrien Tameze. El francés se animó al remate cruzado y un desvío en el camino fue crucial para engañar a Guglielmo Vicario y terminar en el fondo de las mallas.
Torino golpeó en los momentos indicados y dio cuenta de Udinese por 2-1 en el Stadio Olímpico de los Alpes. Tercera victoria al hilo en su reducto para los de Iván Juric, cuyo andar es irregular pero al menos hicieron de su casa un escenario casi inexpugnable.
Josip Brekalo quebró el cero a los 8 minutos de juego. Largo bochazo del arquero Vanja Milinkovic-Savic y todo el oficio de Andrea Belotti para aguantar la pelota y buscar al croata. Precioso derechazo que combinó potencia y precisión y balón ubicado junto al vertical izquierdo de la valla de un Marco Silvestri que esperó su destino de rodillas.
A los 48´ llegó el raddoppio, luego de un interminable flipper dentro del área friuliana. Todo comenzó con un cabezazo de Belotti devuelto por el poste y se desató la lucha encarnizada por darle a la pelota, ya sea para meterla o rechazarla. El último que lo consiguió fue el brasileño Bremer, quien infló la red visitante y puso el 2-0.
Lo de Luca Gotti volvieron al partido en el minuto 77 con un magnífico tiro libre de Fernando Forestieri que pasó por arriba de la barrera y se alojó en el ángulo superior derecho del arco del portero serbio. Y el propio Milinkovic-Savic sostuvo la victoria con una atajada descomunal en los instantes finales, luego de un remate a quemarropa de Lazar Samardzic.
(Foto Principal: @HellasVeronaFC)
