Las historias mundialistas tienen entre otras cosas las ausencias y para la Selección mexicana la más importante y polémica fue la de Cuauhtémoc Blanco en el Mundial de Alemania 2006 bajo la dirección técnica de Ricardo La Volpe. Sumado a esto existe una historia que va de los orígenes del goleador y el primer paso del Bigotón en el América. Vení, pasa y enterate…
La historia de esta enemistad comenzó en el año 1996 cuando Ricardo La Volpe asumió el mando del poderoso América de México, en aquel entonces Blanco era la gran figura joven de las Águilas y de las máximas promesas de la Selección. Los resultados no se dieron, lo que derivó en la salida del entrenador pero la mala relación ya se había generado aunque no se hubiera echo en ese momento “No nos llevábamos bien porque en el América le faltaba mucho el respeto a los jóvenes como yo, Lara, Terrazas y Villa. A los grandes no les decía nada. De ahí le agarramos cierto rencor”, declaró tiempo después Cuauhtémoc cuando se le consultó.
El segundo capítulo se dio unos años más tarde cuando el argentino dirigía al Atlas y ambos chocaron en la Copa pre Libertadores que daba dos plazas para la competencia más importante de América. En el choque directo entre el América y Atlas, Cuauhtemoc hizo los dos goles del triunfo 2 a 0 de su equipo y en una clara señal de restregarle su actuación, se acostó frente al banco de suplentes de los rojinegros con una sonrisa socarrona para el festejo del segundo tanto ante la clara expresión de frustración del Bigotón que se quedaba afuera de la Libertadores.
La mala relación era un hecho consumado pero cada uno siguió con su carrera de manera normal sin hacer grandes escándalos refiriéndose uno del otro, Cuauhtémoc era figura en la Selección y formó parte de los planteles del Tri tanto en Francia 98 y Corea Japón 2002 donde fueron eliminados en los octavos. Pero otra vez la polémica de este enfrentamiento cuando el entrenador Javier Aguirre se alejó de la Selección y la sucesión se dividía entre el histórico goleador Hugo Sanchez y Ricardo La Volpe. Cuando se le consultó a Blanco sobre la sucesión siempre se expresó a favor de la elección de Sánchez, sin embargo los dirigentes se decidieron por el Bigotón, que asumió y empezó a instaurar su idea.
Los primeros años de La Volpe al frente del Tri lo tuvieron a Cuauhtémoc como un miembro estable del plantel y con un buen rendimiento en las Águilas en su segunda etapa allí jugó casi todas las Eliminatorias rumbo a Alemania y en la Copa América de 2004 en Perú. Todo cambio cuando La Volpe decidió no llevarlo a la Copa Confederaciones de 2005 y terminó de explotar cuando lo dejó fuera de los 23 para el Mundial.
Si bien la prensa se hizo eco de la noticia de la ausencia de Cuauhtemoc, ninguno de los dos declaró al respecto y en las conferencias de prensa el entrenador siempre hablo de cuestiones de juego y que no se adaptaba a su esquema táctico. Tuvieron que pasar 8 años para que uno de los dos saliera y ese fue el delantero: “¿Y su yerno? (Rafael “Chiquis” Garcia), él sí entraba en su sistema, fue una cuestión familiar. La Volpe no me llevó porque no tenía los pantalones y a mí me dolió bastante no ir a ese torneo”, declaró. Además en esa entrevista habló de Jared Borghetti, Pavel Pardo y Rafa Márquez que fueron apuntados como cómplices para limpiarlo: “Eso es lo que dicen, a mí no me consta, pero también creo que ellos fueron, con la ayuda de La Volpe. Somos compañeros de trabajo, no éramos amigos”.
Con esa versión, la lupa quedó sobre el técnico que tardó dos años más en contestar y dio sus motivos y aunque no fue muy distinto a sus declaraciones habituales ofreció algunos detalles para entender su punto de vista al respecto. “Yo siempre dije que es un gran jugador. Lo llevé a la eliminatoria y Copa América pero tenía un problema. Para mí actualmente y en aquel entonces, hace 10 años, si un jugador no corre, esta eliminado”, sentenció. Además hablo de las características que poseía en el vestuario y, aunque tuvo autocrítica, sostiene que fue una decisión correcta por el bien del equipo: “Él es un jugador que lidera y no es positivo, por lo que no encajaba. Yo hablé con él y hasta hubo errores míos pero el sistema ya estaba. México demostró al mundo de lo que era capaz, le ganás a Japón y también juegas contra Argentina, Brasil y Alemania, en Alemania; pero de eso no se habló y se habló más de lo de Aarón Galindo y Salvador Carmona, así es la prensa mexicana”, apuntó duro con la prensa a quien tomó de chivo expiatorio de toda la situación.
El ex extremo se retiró en 2016 con la camiseta de su amado América jugando un último partido oficial de forma simbólica con el número 100 en la espalda (a diferencia del 10 que siempre lo caracterizó) después de casi 5 años jugando en varios equipos de la Segunda División de su país y un año en el Puebla en Primera entre 2015 y 2016. Luego de eso se dedicó a la política y fue elegido Alcalde de Cuernavaca, una vez en su nuevo puesto le volvieron a preguntar al respecto de este asunto y bajó considerablemente el tono de sus declaraciones: “Sí me dolió porque fue por el orgullo de este personaje. Ya lo perdoné y creo que a quien obra mal, le va mal en la vida”, dijo cerrando así este capítulo de su vida en el año 2017.
Sólo unos meses más tarde y vía redes sociales el Bigotón volvió a contestar via Twitter respecto a la no inclusión del jugador pero en un tono también más sutil pero volvió a remarcar lo mismo que había marcado en la última consulta respecto al aspecto táctico y el sacrificio de Blanco: “En el 5-3-2 no entraba el juego de Cuauhtémoc, pues cada vez que perdíamos la pelota no había labor de sacrificio. Nunca se adaptó”, contó y después amplió con dos twits más contundentes: “Cuauhtemoc Blanco es un jugadorazo. Sin embargo, para mí lo más importante en un equipo es el trabajo colectivo, no el individualismo”.
“Sé que para muchos Cuauhtémoc es un crack, para mí también lo es, pero en mi idea futbolística lo más importante es el conjunto”.
Si bien ambos dieron sus versiones y se encargaron de dejar en claro no sólo su mala relación sino también diferencias de opiniones respecto al juego, no quedan dudas que esta ausencia caló hondo en el corazón del hincha mexicano que a pesar de que hoy se lo reconoce a La Volpe como un referente de su fútbol y de gran paso por la Selección. Dejaron una polémica que será el tema a hablar cada vez que se formen las listas para los mundiales y también será un punto de referencia para muchas otras historias similares. Además todavía pueden sumarse capítulos a esta historia que parece pasada pero todavía esta muy presente.
Foto destacada: aztecadeportes.com
