El Tottenham de Pochettino sigue en un gran momento, metió su segundo 4-0 consecutivo, esta vez ante Bournemouth, y está a cuatro unidades de un Chelsea que tiene la presión de ganarle mañana a Manchester United. Por ahora, los Spurs se permiten soñar.
En lo que será el último año de White Hart Lane, el Tottenham recibió a Bournemouth con el objetivo de seguir prendido en un torneo en el que solamente ellos pueden evitar que Chelsea sea el nuevo campeón. Y el cuadro londinense es bien consciente de ello, por lo que continuaron desplegando su buen nivel en un primer tiempo donde superaron al rival desde el inicio. Ya a los cuatro minutos Son-Heung Min estuvo cerca de poner el primero al conectar un centro de Christian Eriksen, pero su intento salió desviado. A los doce, Kyle Walker trepó por derecha y sacó el balón hacia atrás para un Moussa Dembelé que exigió a Artur Boruc mediante un fuerte disparo que el portero mandó a córner. Tras este par de avisos, los Spurs consiguieron abrir la cuenta a los dieciséis por intermedio de un oportunista Dembelé que capitalizó un córner de Eriksen que cruzó toda el área. Tan sólo tres minutos después el local propinó otro golpe a su oponente: una presión alta de Eric Dier derivó en Harry Kane, que dejó mano a mano a Son con un taco espectacular para que el surcoreano ponga las cosas 2-0. El elenco de Mauricio Pochettino continuó manejando el juego, pero tardó hasta los últimos minutos de la primera etapa en volver a llevar riesgo al arco de los Cherries. El encargado de hacerlo fue Eriksen, quien llegó a posición de gol en dos oportunidades pero no pudo superar a Boruc en ninguna.
El complemento no presentó diferencias con lo ocurrido en la primera etapa y unos Spurs decididos a liquidar la cuestión volvieron a sacudir las redes visitantes luego de tres minutos. Dele Alli pinchó el balón al área hacia Kane -quien hoy retornó a la titularidad-, que tras luchar cuerpo a cuerpo ante Simon Francis logró ganar la posición, girarse y batir a Boruc con un zurdazo bajo. Poco después, el delantero de la selección inglesa tuvo dos ocasiones consecutivas, asistido por Eriksen y Son, en las que sus remates fueron contenidos por el arquero visitante. Con el encuentro dominado y sin la más mínima resistencia de un desconocido Bournemouth, los Spurs bajaron un poco la intensidad, volviendo a llegar con peligro recién sobre el final del encuentro. Dembelé habilitó entre líneas a Son y el delantero sacó un derechazo que se estrelló contra el lateral de la red. Finalmente, con el duelo en tiempo de descuento, Ben Davies llegó al fondo, encontró al ingresado Vincent Janssen y éste, luego de que su primer disparo fuera tapado por Boruc, decretó el definitivo 4-0 en el rebote. Segunda goleada al hilo por diferencia de cuatro para Tottenham, que alcanzó su mejor nivel en un momento clave de la temporada y aún aspira a que Chelsea pierda puntos. Por ahora se encuentra a cuatro unidades de los Blues, que mañana estarán presionados para ganarle al Manchester United si no quieren terminar la temporada con los de “Poche” respirándoles en la nuca.
Resumen del partido:
https://www.youtube.com/watch?v=VEr8uyRj3jg
Foto destacada: Tottenhamhotspur.com (@SpursOfficial)
