El Tribunal Arbitral Deportivo contrarrestó reclamo del conjunto del sur en 2019. El mismo comprendía la transferencia del volante al Atlético Mineiro, en plena contratación con el club, siendo este traspaso, de carácter ilegitimo.
En junio del 2019 Banfield comenzaba un expediente hacia una de las jurisdicciones más importantes de FIFA. El TAS es conocido por su injerencia en causas de reglamentación, a la que la directiva de Eduardo Spinosa, asistió a realizar una petición por la ida de Juan Cazares a Atlético Mineiro en diciembre del 2015. En ese entonces, el “Taladro” culminaba la prestación del futbolista.
Independiente del Valle, fue el tercero en discordia, ya que obtuvo en el inicio de la profesionalización del ecuatoriano, los derechos deportivos. Sin embargo, la institución argentina se presentó por una indemnización referida en 15 millones de dólares, que el conjunto brasilero debió abonar a su tesoro hacia noviembre del 2018.
El 14 de agosto del año pasado se había pactado una audiencia por parte del tribunal, pero las conclusiones fueron inoportunas para las partes en cuestión.
Por lo tanto, la ruptura contractual definida por Banfield, expresa el descontento por la confidencia que existió en la persistencia del jugador en la institución, siendo anticipado el recordatorio al Mineiro para que no interfiera en la carrera del atacante, quien también fue juzgado en la petición.
Mediante el artículo 18 bis y 18 ter del Reglamento de FIFA, se incitó a sancionar a dichos involucrados, en el que Independiente Del Valle, era damnificado absoluto por acceder al vínculo de prestación del ecuatoriano.
La respuesta del tribunal fue insuficiente. Por eso la dirigencia les hizo llegar a los socios del club, un resumen de la resolución, justificada por las demoras y restricciones para acceder a la compra de divisas y su giro al exterior, que produjo el pago tardío del cargo del préstamo del jugador. En ese aspecto, se dio por inconcebible el resarcimiento a Banfield.
Autor: Gabriel Vázquez