Todavía se recuerda su debut mundialista en aquel 2002 cuando, en Corea-Japón, la selección senegalesa debutaba en su historia de copa del mundo bajando al Campeón vigente de 1998: Francia. Luego, la hazaña iría más lejos hasta que, en cuartos de final, Turquía le pondría un freno a aquella selección de Diuf, Bouba Diop y Camara.
Su siguiente odisea fue en Rusia 2018 donde no pudo pasar zona de grupos igualando el segundo puesto con Japón pero, ante igualdad en todo sentido, al tener más tarjetas amarillas, el fair play le hizo armar las valijas.
A Qatar llega como justo campeón africano, venciendo en una histórica final al multicampeón Egipto de Mo Salah, donde un 4-2 en penales le daría la victoria tras un 0-0 en los 120 minutos disputados.
Su camino rumbo al mundial en la siempre complicada eliminatoria africana fue contundente. Compartió grupo con Togo, Namibia y Congo y, tras 5 victorias, 1 empate y 0 derrotas, clasificó a la fase final donde un mano a mano con Egipto (sí, otra vez Salah / Mané cara a cara) definiría su entrada a la máxima cita.
En la ida, un gol en contra tempranero de Ciss, lo haría caer en su visita al país de los Faraones. En el partido de vuelta, Boulaye Día empataría el global y otra vez desde los doce pasos, esta vez 3-1, los apodados como “Los Leones de Teranga” sellarían su pasaporte a su tercera copa del mundo.
El Grupo A será su lugar, donde Senegal luchará por su pase a octavos de final. Lunes 21/11 los tendrá frente a Países Bajos en su debut mundialista; 25/11 la segunda fecha contra el local Qatar y cerrará su fase de grupo el 29/11 contra Ecuador. En un grupo parejo, esta vez la selección africana se perfila como candidato.
Informe: Previale Leonardo
foto: https://www.sportingnews.com/
