Cuesta creerlo pero se disputa una final en Alemania y no está Bayern Münich. El pentacampeón de la Bundesliga esta vez no llegó a la instancia decisiva de la Copa de Alemania – conocida como DFB Pokal – cuyo trofeo lo decidirán Eintracht Frankfurt y Borussia Dortmund.
“Die Schwarzgelben” deberán quebrar el maleficio de las últimas 3 finales disputadas, en las que cayeron derrotados. Los de la Selva Negra, en cambio, disfrutan la chance de jugar un encuentro decisivo luego de 11 años y de jugar el play-off por la permanencia en el final de la temporada anterior.
Será el quinto duelo entre ambos por el segundo torneo en orden de importancia del fútbol de los campeones del mundo, y registran 2 triunfos por bando. Los de Francfort-Del Meno se impusieron en la primera ronda de la edición 1968/69, con un contundente 6-2 gracias a sendos dobletes de Hermann-Dieter Bellut y Jurgen Grabowski + el restante gol de Bernd Nickel; Sigfried Held y Werner Weist descontaron para Dortmund.
Diez años más tarde volvieron a enfrentarse pero en los octavos de final, y allí Frankfurt volvió a imponerse pero esta vez fue 3-1, cortesía de Rudolf Elsener por duplicado y Wolfgang Kraus (Lothar Huber de penal había inaugurado el tanteador para el BVB).
Sin embargo, Borussia Dortmund se tomó revancha en los encuentros subsiguientes. Por la segunda ronda de la temporada 2007/08, el conjunto que por aquel entonces dirigía Thomas Doll ganó 2-1 por anotaciones de Markus Brzenska y Mladen Petric (Ioannis Amanatidis había adelantado a Frankfurt).
La última vez que se vieron las caras fue en la edición 2013/14 y por los cuartos de final, la victoria fue de 1-0 gracias a un solitario gol de Pierre-Emerick Aubameyang.
Eintracht Frankfurt posee en su vitrinas 4 trofeos: 1974, 1975, 1981 y 1988 (además fue subcampeón en 1964 y 2006). Borussia Dortmund se quedó con el título en 3 ocasiones: 1965, 1989 y 2012 (también alcanzó otras 5 finales y viene de perder las 3 últimas).
Desde las 15 hs. de la Argentina será a todo o nada en el Olympiastadion de Berlín. Sí, el mismo que hace 81 años fue el escenario de los Juegos Olímpicos que mostraron la derrota de Hitler ante ese moreno de Alabama que ganó 4 medallas doradas ante sus narices. Porque Jesse Owens demostró que lo único superior a cualquier raza es el deporte. Que el fútbol levante esa bandera y que las 75 mil personas presentes en esa maravilla arquitectónica vivan una verdadera fiesta. Que no se preocupe el perdedor: siempre habrá un consuelo… además de una cerveza.
(Foto: Bundesliga.com)
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