El “Rossonero” estuvo al borde de la eliminación pero un doblete de Calhanoglu lo ayudó a subirse al expreso de medianoche. Zlatan le puso el moño y los de Pioli jugarán las semifinales.
Complicada batalla tuvo que librar Milán en el Giuseppe Meazza para quedarse con un agónico triunfo 4-2 sobre Torino, en otro de los encuentros correspondientes a los cuartos de final de la Coppa Italia.
Un “Toro” muy golpeado luego del humillante 0-7 sufrido en casa a manos de Atalanta y enfrente un conjunto milanés en franca levantada, con 4 éxitos en los últimos 5 juegos (casualmente desde el regreso al club de Zlatan Ibrahimovic).
El dueño de casa impuso condiciones a los 12´, con la apertura del tanteador. Muy buen desborde pie a pie de Ante Rebic en la izquierda y un envío rasante para la absoluta soledad de Giacomo Bonaventura, quien solamente la tuvo que empujar.
Cuando mejor jugaba el local y merodeaba el segundo grito, los de Walter Mazzarri encontraron la igualdad con una verdadera patriada de Bremer. El brasileño cortó juego en su propio campo y encabezó una réplica fulminante. Descarga para Andrea Belotti y pique mortal para ir a buscar. Belleza de pase de Simone Verdi y Bremer definió como si toda su vida hubiese jugado de centrodelantero.
Pioli buscó mayor peso específico en ataque y reemplazo a un apagado Piatek por Zlatan, a los 65´. Pero 6 minutos más tarde, llegó lo impensado.
El nigeriano Ola Aina en la izquierda amagó un par de veces y metió un centro al corazón del área chica. Otra vez Bremer pisó la tierra prometida y casi que tuvo que agacharse para conectar de cabeza y sellar su inédito doblete.
Se moría el encuentro – y la ilusión local – hasta que en el minuto 91 vino el empate tranquilizador. Samu Castillejo descargó hacia atrás para Hakan Calhanoglu y el turco le dio con alma y vida desde afuera del área. Desvío de Bremer en el camino (sí, justo él) y Salvatore Sirigu nada pudo hacer.
Milán no se quedó conforme y en el tiempo adicionado fue por más. Zlatan se lo perdió solito y solo debajo del arco y la contienda se extendió hasta la prórroga.
Allí el local hizo méritos suficientes como para demostrar que no quería los penales. Sirigu era un muro infranqueable cuando le ahogó el grito de gol primero a Calhanoglu y luego a Theo Hernández.
No lo pudo sostener el “Toro” en el segundo tiempo suplementario y en cuestión de 2 minutos se derrumbó su castillo de naipes.
A los 116´, una escapada de Hakan Calhanoglu por la izquierda terminó con un gran disparo cruzado del turco que venció la resistencia de la mano izquierda del bueno de Sirigu.
Apenas 2 minutos más tarde, un nuevo contraataque hizo pasar para el cuarto al equipo visitante. De Castillejo en la derecha para Rafael Leao y el portugués pivoteó a gusto dentro del área. Sutil cesión para Zlatan y el sueco liquidó el pleito con un derechazo alto.
De ninguna manera merecía quedar afuera Milán, más que nada porque Sirigu tuvo una destacada labor (más allá de los 4 goles recibidos). En semifinales se las verá nada menos que con Juventus, pero el objetivo de la reconstrucción ya puso primera y es una linda oportunidad para volver a transitar los caminos del protagonismo.
Síntesis:
Milán (4): Donnarumma; Conti, Kjaer, Romagnoli y Hernández; Castillejo, Krunic (Calhanoglu), Bennacer y Bonaventura (Rafael Leao) ; Piatek (Ibrahimovic) y Rebic (Kessie). DT: Stefano Pioli.
Torino (2): Sirigu; Izzo, N´Koulou y Bremer (Ndjiji); De Silvestri (Laxalt), Rincón (Lyanco), Aina, Lukic, Berenguer (Milico) y Verdi; Belotti. DT: Walter Mazzarri.
Árbitro: Fabrizio Pasqua.
(Foto Principal: Yahoo News UK)