Los “Culés” perdían 2-0 hasta el minuto 85 y dejaban el invicto liguero en Andalucía. Hasta que la resurrección se adelantó más de lo esperado con el siempre vital aporte de su figura divina.
En un partido electrizante, Sevilla y Barcelona terminaron 2-2 en el Ramón Sánchez Pizjuán. Notable prueba de vida para los de Ernesto Valverde, que estaban para el cachetazo y rescataron un impensado empate en un territorio hostil.
Es que los de Vincenzo Montella se mentalizaron para dar el golpe ante un equipo blaugrana que no contó desde el arranque con Lionel Messi. En efecto, la ausencia de la “Pulga” en los compromisos de la Selección Argentina en la Fecha FIFA despejó toda clase de dudas con respecto al estado físico del rosarino: no estaba para jugar entresemana ni mucho menos como titular para este encuentro correspondiente a la jornada 30.
Los locales se adelantaron en el marcador en el minuto 36, cuando Franco Vázquez dejó mudo al circuito defensivo catalán. De Sergio Escudero para Joaquín Correa por izquierda y un preciso pase al medio con destino al ex Belgrano de Córdoba. El pésimo marcaje de los centrales le dio tiempo y espacio al ítalo-argentino, quien pese a no rematar del todo bien, le alcanzó para batir a Ter Stegen.
En el arranque del complemento, los andaluces elevaron la cuenta a 2, para preocupar al líder de La Liga. A los 50´, la presión sobre la salida de los visitantes dio resultado y Correa inició una contra con un pase hacia Escudero. El lateral nacido en Valladolid quedó cara a cara con Ter Stegen, pero el alemán salvó con el pecho su potente disparo. Luis Muriel recogió el rebote y tuvo la frialdad necesaria para colocar la pelota de manera rasante. Ayudó el desvío en Samuel Umtiti y poco pudo hacer el portero germano para evitar la segunda caída de su arco.
Listo, el local jugaba mejor y estaba más cerca de golear que el Barsa de arrimar peligro. Entonces Valverde no anduvo con vueltas y mandó a la cancha a un tal Lionel Messi, como para ver si la historia cambiaba.
Mejoró en sus intenciones de ataque, es cierto. Pero cada contra de Sevilla llevaba demasiado peligro y no hubiese sido extraño que terminase en goleada a favor de los dueños de casa.
Cuando el partido parecía planchado, Barcelona encontró el descuento mediante una pelota parada. A los 85´, tiro de esquina ejecutado por Denis Suárez desde la derecha y peinada de Paco Alcácer en el primer palo. Por el fondo apareció Luis Suárez para sacudir la red rival con una acrobática definición.
No se repuso Sevilla del impensado achique en el score, que 60 segundos más tarde los “Culés” equilibraron las acciones. Philippe Coutinho por izquierda desbordó y metió la pelota hacia la tierra prometida. Es que un balón casi en la puerta del área con un Messías a la carrera está escrito en la Biblia que terminará en gol. Zurdazo preciso al palo derecho de Sergio Rico y no hubo crucifixión. Ningún profeta se animó a avizorar que este partido iba a terminar en empate. Pero tampoco es necesario entender cualquier misterio de la fe: la respuesta simplemente es MESSI.
Atlético Madrid puede descontar puntos, es cierto. El invicto de Barcelona estaba muerto… hasta que se levantó y anduvo.
Real Madrid no tuvo problemas para golear 3-0 a un ya entregado Unión Deportiva Las Palmas. Sólida performance para los entrenados por Zinedine Zidane, que buscan su mejor versión de cara al trascendental duelo del martes ante Juventus, por los cuartos de final de la UEFA Champions League.
En el Estadio de la Gran Canaria, el que cantó mejor fue el visitante. Sin Cristiano Ronaldo pero con un Gareth Bale encendido, los “Merengues” fueron superiores ante un rival que no levanta cabeza y que sufre para mantenerse en Primera División.
A los 26´ el Madrid quebró el cero, con una jugada cargada de absoluta precisión. Hermoso pase filtrado de Luka Modric para el pique de Bale por la izquierda. El galés encaró hacia el arco de Leandro Chichizola e infló la red con un zurdazo alto.
Los de Zizou estiraron la diferencia 13 minutos más tarde y desde los 12 pasos. Jonathan Calleri lo camiseteó a Lucas Vázquez en el área propia y el colegiado Pablo Fernández señaló la pena máxima. Karim Benzema fue implacable desde los 11 metros y sentenció de manera temprana el destino del partido.
La goleada se consumó con otro penal, en el minuto 51´. Falta de Ximo Navarro sobre Bale dentro de la 18 y nueva chance desde los 11 metros. Esta vez fue el británico el ejecutor y redondeó su doblete como para que lo tengan en cuenta.
Girona no pudo prolongar su sueño europeo y apenas empató 1-1 con Levante, en el Municipal de Montilivi. Dejó pasar una buena chance el novel equipo de La Liga de acercarse a la zona de clasificación continental, ante un adversario que celebró el punto para mantenerse a 7 unidades por encima del descenso.
Los “Blanquivermels” gritaron primero por intermedio de Alex Granell, en el minuto 54. Sin embargo, los valencianos establecieron la paridad a los 68´ por obra de José Luis Morales.
Athletic Bilbao y Celta de Vigo tampoco se sacaron ventajas e igualaron 1-1 en San Mamés. Agónica igualdad para los gallegos, que no resignan sus esperanzas de clasificarse a la próxima Europa League.
Un balón detenido puso en ventaja a los vascos, en el minuto 55. Córner desde la derecha de Mikel Susaeta y Raúl García reventó el poste del arco defendido por Sergio Álvarez. Unai Núñez estaba en el lugar indicado para recoger el rebote y señalar el 1-0 parcial.
Los de Juan Carlos Unzué respiraron en el primer minuto de adición porque alcanzaron el postrero empate. Gran pase de Hugo Mallo para una espectacular volea de Brais Méndez y marcador en tablas.
(Foto Principal: Irish Mirror)