El anfitrión le ganó a Irán un partidazo y buscará su segunda corona consecutiva. Los “Valientes” hicieron historia frente a Corea del Sur y están cerca de tocar el cielo con sus manos.
El camino hacia la final ya está allanado y hay 2 interesados en alzar la Copa Asiática 2023. De un lado el organizador – que también se dio el lujo de albergar la pasada Copa del Mundo – y enfrente la sorpresa que llegó mucho más lejos de lo esperado y que ahora no va a rendirse con facilidad.
En Doha, Qatar derrotó 3-2 a Irán y sacó pasaje a la gran final del sábado. Primer triunfo de los “Marrones” ante los persas por el certamen continental, donde habían cosechado 2 derrotas en los enfrentamientos previos: 0-2 en 1988 en el mismo suelo qatarí y 0-1 en 2015 en Australia.
Los iraníes tomaron la iniciativa y en 4 minutos de juego inauguraron el marcador. De un saque lateral en forma de centro de Jahanbakhsh, la pelota cayó en el área local. Peinada de Ezatolahi y rechazo a medias de un defensor. Fue espectacular la resolución de Sardar Azmoun, quien se animó a una chilena y colocó el cuero por encima del arquero Barsham al palo más lejano. Un verdadero golazo.
Una carambola terminó en el empate qatarí 13 minutos más tarde. Akram Afif metió un centro atrás y Jassem Gaber le dio como venía. El balón rebotó en Ezatolahi y se elevó por sobre su propio guardavallas Beiranvand, para terminar casi en cámara lenta en el fondo de las mallas.
Minuto 43 y Afif se inspiró para dar vuelta el resultado. Lindo slalom por izquierda para juntar adversarios y al pisar la tierra prometida encontró el resquicio para un potente derechazo que dejó sin chances al portero iraní.
Pero los “Príncipes de Persia” no se amedrentaron y al inicio del segundo tiempo alcanzaron la paridad. Disparo de Ezatolahi desde el borde del área y la bola dio en la mano de Ahmed Fathy. El árbitro kuwaití Al Ali consultó con el VAR y sancionó penal para la visita. Jahanbakhsh tuvo temple de acero y canjeó la pena máxima por dinero en efectivo.
La explosión qatarí se produjo a 8 minutos del epílogo. Afif la llevó dominada por la izquierda y metió un centro que fue rechazado de cabeza por un defensor. Le cayó a Abdulaziz Hatem, que había ingresado recientemente, y en la primera que tocó le dio al arco. El remate al final se convirtió en una asistencia para Almoez Ali, quien estuvo donde tienen que estar los goleadores y definió con calma con un derechazo rasante.
La visita terminó el encuentro con uno menos por la expulsión de Khalilzadeh por evitar una ocasión manifiesta de gol ante Akram Afif.
El otro finalista será Jordania, que en Al Rayan doblegó 2-0 a Corea del Sur y llegó a la gran definición por primera vez en su historia. Nuevo golpe de los “Valientes”, que ya habían demostrado carácter en el increíble encuentro que le ganaron a Irak y ahora se cargaron a otro de los favoritos (y con justicia).
Las emociones llegaron en el complemento, donde una ráfaga jordana de 13 minutos sentenció el partido. A los 53´, un mal pase atrás de Park Yong-Woo en la mitad de la cancha inició la sesión de contraataque. Mousa Tamari recuperó la pelota y encaró hacia el área rival. Deliciosa habilitación para la diagonal de Yazan Al Naimat, quien la picó con maestría ante el achique de Jo Hyeon-Woo y quebró el cero.
El nuevo golpe llegó en el minuto 66 con una réplica que fue fulminante. Mousa Tamari arrancó por el costado derecho desde el propio campo y se fue camino a la gloria. No se la podían quitar y al pisar la media luna metió un preciso zurdazo que se alojó en el palo de la mano diestra del portero surcoreano. Delirio jordano y merecida clasificación a la final.
Será la primera vez que Qatar y Jordania se vean las caras en el torneo continental. De manera oficial – entre eliminatorias mundialistas y para la Copa Asiática – se enfrentaron en 8 ocasiones y el historial marca 4 triunfos qataríes contra 2 de los jordanos (2 empates).
Hace 20 años que un seleccionado no repite el título y Qatar tiene todo a favor para conseguirlo (Japón se quedó con las ediciones de 2000 y 2004). Jordania ya escribió una página gloriosa en su historia pero todavía le queda tinta y un espacio importante en su libro de vida. Será a todo o nada para ponerle el broche dorado a una Copa Asiática que fue de lo más emocionante.
Por Emiliano Schiavi / @ejschiavi
(Foto Principal: @afcasiancup)
