La voz latina “Alter ego” bien podría traducirse como “El otro yo” y se utiliza para nombrar a una persona real o ficticia, a la que se tiene le confianza absoluta y con la cual existe un alto grado de identificación.
El caso más conocido en la literatura es la novela de Robert Louis Stevenson, “Dr. Jekyll & Mr. Hyde”, donde el bien y el mal residen en la misma persona. Una lucha interna constante que evidencia una doble personalidad.
En los cómics se puede ver a Superman transformado en Clark Kent para mezclarse sin problemas entre los ciudadanos de Metrópolis, o bien a Bruce Wayne enfundado en su traje de Batman, para combatir el crimen en Ciudad Gótica. A veces parecidos y otras diferentes, pero cada personaje necesita a su alter ego porque siente que es su complemento.
En los finales de los 60s y principios de los 70s, el mundo de la música aún no superaba la separación de los Beatles ni tampoco aceptaba la maldición de los 27 años, que se llevó a talentos como Brian Jones, Janis Joplin, Jimmy Hendrix y Jim Morrison, todos a esa temprana edad. Tampoco eran felices las últimas horas de Elvis Presley, recluido en Las Vegas y convertido en una marioneta que ya no daba más con su propia alma.
La irrupción de un personaje llamado Ziggy Stardust en la escena musical allá por 1972 fue un bálsamo ante semejante angustia y revitalizó la contracultura iniciada una década antes. Ziggy era un extraterrestre bisexual, con imagen andrógina, que se convirtió en una estrella de rock. Era ni más ni menos que el “Alter ego” de David Robert Jones, un músico británico nacido en Londres en 1947. El mundo luego lo conoció como David Bowie.
Sin tanto glam rock pero con el ritmo impuesto por Chelsea, que ya se consagró campeón y su andar en este campeonato fue aún más seguro que un punteo de Jimmy Page con una Fender Stratocaster. Los “Blues” vuelven a celebrar en Stamford Bridge y le desearán buen viaje a Sunderland en su regreso a la Championship League.
Arsenal tiene la remota chance de jugar en la próxima UCL. Pero no depende de sí mismo y jugar la Europa League no parece una mala idea. Los “Gunners” deberán vencer a Everton en Highbury el Emirates y esperar que los “Reds” no lo hagan.
Precisamente Liverpool sabe que si suma de a 3 ante el descendido Middlesbrough, se clasificará para la UEFA Champions League. Sólo quedaría determinar si lo haría en forma directa o en la fase preliminar.
Manchester City también quiere renovar su carnet de socio activo de la UCL y un triunfo en el Vicarage Road, la casa de Watford, le asegurará el sello tan deseado.
Manchester United tiene la cabeza puesta en la final ante Ajax del próximo miércoles. Los “Red Devils” buscarán su mejor forma frente a Crystal Palace, y además sentir el calor de su gente en el “Teatro de los Sueños”.
Hull City se cayó en los últimos partidos y no pudo escaparle al fantasma del descenso. Los “Tigers” se despedirán con honor en el KCOM Stadium ante Tottenham, el digno rival que tuvo Chelsea en la carrera por el título.
Leicester City tuvo en un año sensaciones encontradas. Del sorprendente campeonato, la aventura europea, el coqueteo con el descenso y la resurrección con Craig Shakespeare; los “Foxes” clausurarán la temporada en Filbert Street el King Power Stadium frente a AFC Bournemouth.
Southampton empató sin goles 3 de sus últimos 4 partidos jugados. Es hora de quebrar el cero así los “Saints” podrán marchar en el St. Mary´s Stadium ante su gente, en su duelo con los “Potters” de Stoke City.
Buen registro en Turf Moor para los “Clarets” de Burnley, que ganaron más de la mitad de sus encuentros disputados como locales. La última función espera que sea con brindis incluido – dicen que los mejores viñedos están allí mismo, en el Condado de Lancashire – frente a West Ham United.
Swansea City respira aliviado porque se queda en la Premier y en Gales será recibido con honores. El “Cisne Blanco” quiere imponer su majestuosidad en su partido ante los “Baggies” de West Bromwich Albion.
Un 21 de mayo, pero de 1983, la canción “Let´s Dance” incluida en el albúm homónimo alcanzaba el número 1 de las listas del Billboard Hot 100. Fue la confirmación para David Bowie, cuya carrera ascendía y el reconocimiento a su talento iba más allá del Reino Unido.
“Mi música explica lo que siento por mí”, declaró alguna vez el Duque Blanco. Compositor y cantante, actor, productor… un verdadero ícono que vendió cerca de 140 millones de discos. La Revista Rolling Stone lo ubicó en el puesto número 39 en el ranking de los 100 mejores artistas del rock de todos los tiempos.
El 10 de enero de 2016 murió con 69 años recién cumplidos, víctima de un cáncer de hígado, en su departamento de la ciudad de Nueva York. Editó 25 álbumes de estudio (Blackstar lo publicó 2 días después de su muerte) y su influencia en el género del glam rock marcó una nueva puesta en escena en la música de los años 70´s.
David creía que “podemos ser héroes sólo por un día”. Ziggy fue ese mesías del rock, que bajó de las estrellas y quiso evitar la destrucción del planeta Tierra. No lo consiguió – nunca fue una tarea sencilla – pero nos dejó su música y su impronta. No queda otra que disfrutar de la era del “Modern Love”. Así que… “Let´s Dance”.
(Foto: Las Armas)
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