En el duelo londinense, los “Hammers” tomaron del cuello a los “Spurs” y los “Lanzini” por las escaleras. Si los de Antonio Conte se imponen a Middlesbrough, sacarán 7 de diferencia con 9 por jugar.
West Ham United se impuso 1-0 a Tottenham Hotspur y le sirvió en bandeja el campeonato a Chelsea. En el Estadio Olímpico de la capital británica, los de Slaven Bilic pusieron fin a la racha de 8 triunfos consecutivos de los “Spurs” y les dieron un certero mazazo en sus aspiraciones de campeón.
El fútbol vistoso y efectivo de los “Pocheboys” quería imponer condiciones en un clásico citadino, como bien lo hizo la semana pasada ante los “Gunners” en White Hart Lane (de hecho, Mauricio Pochettino apenas perdió en 4 de 25 partidos ante rivales londineneses).
Sin embargo, fueron los locales quienes avisaron con un zurdazo de Manuel Lanzini que se fue ancho por la valla custodiada por el galo Hugo Lloris, cuando Jonathan Calleri la pedía solo por el centro.
Tottenham respondió a los 21´, con una jugada que hizo lucir 2 veces al arquero español Adrián. Harry Kane probó desde afuera del área y el guardavallas andaluz tapó a medias. El rebote le quedó a Dele Alli, pero su remate fue bloqueado por un defensor. Nuevamente le cayó al “Mago” Harry, quien disparó buscando la redención y esta vez Adrián a puro reflejo envió la pelota al córner con su pie izquierdo (ni Daniel Day Lewis hubiese tenido semejante actuación).
Más allá de esto, West Ham le planteó un partido incómodo a los “Spurs”, con presión asfixiante y demasiada pierna fuerte. Esto obligó a los visitantes a jugar a lo que no saben: la fricción y el choque.
El único argumento para ambos era el remate de media y larga distancia, pero la imprecisión estaba a la orden del día y el marcador en silencio fue el justo resultado para irse al descanso.
En el complemento, los “Spurs” arrancaron con más ganas que fútbol y el coreano Son volvió a exigir los reflejos de Adrián, con un remate cruzado en posición de número 7.
Pero a los 65´ los dueños de casa sacaron el máximo provecho de una serie de rebotes y sacudieron la red enemiga. Una bola cruzada de izquierda hacia el centro volvió a ingresar al punto penal con un pase de Sam Byram. Andre Ayew intentó disparar, pero una pifia del ghanés descolocó a su marcador, Jan Verthongen. La pelota le quedó servida a Manu Lanzini, quien no dudo en sacar un potente derechazo para batir a Lloris y marcar su octavo gol en el campeonato (segundo que le convierte a los “Spurs” en esta misma temporada).
Tottenham sintió demasiado el golpe y se quedó sin ideas. A punto estuvo Calleri de sentenciar la historia, cuando quedó solito y solo frente a Lloris, pero el arquero francés ensayó una atajada colosal y mantuvo con vida al visitante. Tampoco entre Robert Snodgrass y Ashley Fletcher pudieron liquidarlo. Pero no hubo tiempo para más, y los “Hammers” gritaron tan fuerte que se escuchó hasta en Stamford Bridge.
Sólo un milagro dejará nuevamente con chances a Tottenham, que hizo una extraordinaria campaña pero que el ritmo impuesto por el Chelsea de Antonio Conte ha sido demasiado difícil de seguir.
(Foto: calciomercato.it)