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¿Y ahora qué?

La Era Troglio se suma a la lista de técnicos que pasan por el banco matador por una corta estadía. Quien supo reemplazar a Mauro Camoranesi tras tan sólo 6 partidos dirigidos, ha dejado su cargo sin haber llegado a los 12 meses consecutivos en el banco de Tigre.

Pretemporada de por medio, dos derrotas consecutivas, cambios tácticos y de nombres, y un público que se dividía entre aquellos que pedían por la salida del DT, y aquellos que pedían su continuidad.

El nuevo presidente tendrá que buscar un reemplazante rápido. Queda mucho torneo y Tigre debe levantar cabeza, porque si bien está cómodo en el presente certamen, la AFA es una incertidumbre y no se sabe cuántos descensos habrá la próxima campaña y, bajo esa inquietud, el mundo de Tigre tiembla.

25 veces se sentó en el banco para dirigir al Matador. 8 triunfos, 9 empates y 8 derrotas. Números parejos que permiten objetar el presente. Sin embargo, no todo son los números, Troglio ha dejado muchas conclusiones más allá de esta pobre estadística.

Las lesiones. La Era Troglio se ha visto caracterizada por una inusual suerte en las lesiones del plantel. Blengio se lesionó y estuvo 9 meses parado. Cuando volvió a jugar, no logró terminar el primer tiempo que tuvo una nueva lesión, distinta a la anterior. Javi García también sufrió una fuerte lesión y quien parecía ser la figura del equipo, Lucas Janson, también ha tenido que quedar marginado durante prácticamente todo el torneo.

Los refuerzos. Troglio ha tenido que aceptar la situación del fútbol argentino y es así que en el presente semestre han salido 7 jugadores, mientras que sólo 1 ha llegado a completar su equipo. Para colmo, este único refuerzo, se lesionó en su debut.

Los juveniles. Ante el contexto de lesiones, muchas salidas y pocas llegadas, Troglio tuvo que ser creativo y apoyarse en los jóvenes de las juveniles matadoras. Diego Sosa debutó y fue la revelación del equipo, tanto de volante ofensivo, como de lateral o carrilero. Alexis Castro pasó de ser un jugador de recambio a un nombre importante del primer equipo. Miérez también debutó y y hoy es visto como gran promesa. Agustín Cardozo también apareció y en el último encuentro supo jugar los 90 minutos.

Así fue como la Era Troglio pasó, sin tantos puntos, pero reforzando las juveniles y la confianza en la cantera tigrense. Pero el fútbol es exitista a corto plazo y no permite proyectos más allá del partido a partido. Tigre se quedó sin Troglio y ahora habrá que ver quién toma el mando de este equipo que naufraga de la mitad para abajo de la tabla y que no disputa copa alguna.

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