Paolo Guerrero llegó el viernes a Buenos Aires para entrenarse bajo las órdenes de Ricardo Gareca mientras espera que el TAS le reduzca la sanción impuesta por la FIFA y así poder estar presente en los amistosos de marzo ante Croacia e Islandia.
Ante la sanción que le impide desempeñarse como futbolista profesional —incluido entrenar—, el capitán de la Selección peruana, Paolo Guerrero, viajó a Buenos Aires, donde se someterá a un exigente plan de entrenamiento bajo las órdenes del cuerpo técnico encabezado por el “Tigre” Gareca.
El Depredador está cumpliendo una sanción de 6 meses de suspensión por haber dado positivo el control antidoping realizado en el partido frente a Argentina de las últimas eliminatorias. La misma expira el 4 de mayo luego de que la FIFA redujera la sanción en diciembre pasado de un año a seis meses.
Sin embargo, el lunes pasado los abogados del Depredador apelaron ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) con el único fin de anular la sanción dictaminada por la FIFA. En las próximas semanas, el TAS dará el veredicto final y el delantero del Flamengo espera que la sanción sea anulada para volver a jugar lo más pronto posible.
Por tal motivo, y para ponerse en ritmo, el delantero entrenará con un equipo especial de profesionales en Buenos Aires: “Claro que quiero jugar, si soy inocente. Quiero estar en todos los partidos preparatorios de la Selección”, dijo Guerrero al llegar al Aeropuerto de Ezeiza.
“Como conversé con Gareca, él no cree que me vaya a faltar fútbol. Lo que él me pidió es que me prepare bien físicamente y psicológicamente”, explicó el delantero.
El complejo Buenos Aires Football, propiedad de Matías Almeyda, será la base del entrenamiento del Depredador, que mantiene las esperanzas de poder disputar con la Bicolor los amistosos de marzo.
INFORME: LUCAS BLANCO
Imagen destacada: América TV