Los del Principado redondearon un global de 6-3 y regresan a las semifinales luego de 14 años. Dortmund hizo lo que pudo pero jamás se acercó al sueño imposible.
Mónaco venció 3-1 a Borussia Dortmund y se clasificó semifinalista del torneo de clubes más importante del “Viejo Continente”. Nueva función de goles y eficacia para los de Leonardo Jardim, que son la viva expresión de un equipo que “juega y deja jugar”.
No era fácil para los germanos sobreponerse a una situación fuera de lo común, que encima terminó con un resultado deportivo adverso. Pero la UEFA se vistió de productor teatral y dejó en claro que “el show debe continuar”, sin importar que en la vida hay otras prioridades.
En el Louis II el clima era cordial debido a la muestra de afecto y de respeto entre ambas hinchadas tras lo sucedido la semana pasada. La pelota comenzó a girar y esta serie nos regaló 180 minutos vibrantes.
Los locales enseguida quebraron el cero, cortesía de su nueva joya. A los 3 minutos Benjamin Mendy se animó con una incursión al campo contrario y llegó hasta 3/4 de cancha. Como nadie salía a marcarlo, el defensor sacó un furibundo remate que le reventó el pecho al arquero Roman Buerki. Kylian Mbappe Lottin estuvo atento al rebote y no hizo más que empujarla para decretar el 1-0 parcial.
Los de Thomas Tuchel respondieron con una pelota detenida. Un magnífico tiro libre de Nuri Sahin fue devuelto por el vertical izquierdo, cuando Danijel Subasic ya estaba vencido.
Mónaco elevó la cuenta a 2 con un zarpazo de su tigre goleador. A los 17´, preciso centro de Thomas Lemar para que Radamel Falcao García ensayase una hermosa palomita y se transforme en el segundo grito monegasco. Parecía cosa juzgada, pero nunca hay que dar por muertos a los alemanes.
En la etapa final Dortmund arrancó mejor y llegó rápidamente al descuento. Excelente jugada individual de Ousmane Dembelé por el andarivel derecho y un centro con la izquierda para Marco Reus. El capitán agarró a contrapierna a Subasic e infló la red para el 1-2 esperanzador.
El partido era de ida y vuelta con un mediocampo partido. El golpe por golpe que propuso Mónaco pareció un buen plan ante la desesperación de los visitantes.
Falcao tuvo el tercero a los 64´, con un lindo enganche ante el cierre de un defensor pero estuvo poco fino a la hora de picarla sobre la salida de Buerki. Cuatro minutos más tarde Mbappe disparó cruzado, pero el guardavallas helvético salvó con la punta de sus dedos (extrañamente no cobraron córner).
Reus pudo empatarlo a los 73´, pero su disparo salió débil y muy al medio del arco, bien controlado por el arquero croata. Enseguida respondió Bernardo Silva en el área de enfrente y estuvo muy bien Buerki para ahogarle el grito de gol.
Sin embargo, quien tuvo la llave fue Valere Germain, quien a los 22 segundos de haber ingresado al campo de juego en lugar de Mbappe, liquidó el partido. Error en la salida por parte de Lukasz Piszczek y un astuto Lemar que le robó el balón. Su centro se desvió en un defensor y le quedó aún mejor a Germain para definir sin ponerse nervioso ante el achique de Buerki. El gesto fue elocuente … cierren todo que esto ya terminó.
Pierre-Emerick Aubameyang quiso el suyo con un remate al primer palo pero estuvo atento Subasic para negarle el tiro del final (¿habrá sido el último partido europeo de la pantera gabonesa con la camiseta del Dortmund?).
Justo ganador resultó Mónaco en esta serie y nadie le quita la ilusión a un equipo que esta temporada decidió romper con la hegemonía del PSG a nivel local, y que además alimenta su sueño europeo.
(Foto Principal: AS Mónaco tw oficial)