La carrera por el campeonato tuvo a la “Vecchia Signora” como ganadora en terreno ajeno y el sueño del octavo título en fila es casi una realidad. Triunfos de Atalanta, Sampdoria y Torino, además de una aliviadora victoria de Udinese con goles argentinos.
Juventus se impuso 2-1 sobre Napoli en el mismísimo San Paolo y prácticamente se metió la liga en el bolsillo, ya que le sacó una distancia de 16 puntos a su vencido (y principal perseguidor).
Absoluta intensidad para EL partido del campeonato, donde iba a saberse si el certamen continuaba hacia lo inevitable o si algún milagro inesperado le pondría algo de suspenso.
Los de Carleto Ancelotti estaban ante la última oportunidad de impedir que el camino de la “Juve” hacia un nuevo scudetto estuviese más que allanado. En la tierra de San Gennaro, había que santificar el honor y – de paso – hacerle sentir el rigor al enemigo del norte.
Por eso los “Azzurri” comenzaron con un ritmo avasallante sobre un equipo que en las últimas actuaciones había acumulado más dudas que certezas: un ojo puesto en el segmento doméstico, pero la cabeza enfocada al problema continental de revertir una dura serie ante Atlético Madrid.
Y fue un error del anfitrión el que abrió el partido en favor del equipo de Massimiliano Allegri. Minuto 25´ y un mal pase hacia atrás de Kevin Malcuit fue capturado por Cristiano Ronaldo. El portugués se anticipó a la desesperada salida de Alex Meret fuera del área y el joven arquero nacido en Udine no tuvo más remedio que cometerle infracción. Ocasión manifiesta de gol abortada y roja directa para el portero. Se cayó la estantería para el local, que tuvo que sacrificar en ataque a Milik para que ingresara David Ospina a la portería.
Bien, sobre llovido mojado … porque de esa falta llegó un precioso tiro libre de Miralem Pjanic, que dejó sin recursos a un todavía frío Ospina y arriba 1-0 la Juventus.
Echarle la culpa a la mala suerte sería la solución más fácil, porque el desbloqueo del marcador llegó por un error propio. Pero hay que reconocer que Napoli NO ligó en los momentos indicados. Piotr Zielinski tuvo el empate cuando se filtró entre los 2 centrales y disparó al pisar el área grande, pero la caprichosa rebotó en el vertical izquierdo de Szczesny.
Para colmo de males, la “Vecchia Signora” volvió a golpear en el minuto 39. Córner corto desde la derecha y centro cerrado de Federico Bernardeschi. Emre Can cabeceó muy solo y la bola rebotó en Elseyd Hysaj, para descolocar a Ospina y terminar en el fondo de la red. Ventaja de 2 para la “Juve” y Napoli al descanso con demasiada preocupación.
Sin embargo, al inicio del segundo capítulo los “Azzurri” recuperaron el aliento. Pjanic tuvo el acto reflejo de cortar un avance con la mano y se ganó la segunda tarjeta amarilla. Ambos con 10 y la moral creció en el local.
A la hora de partido, Napoli regresó al planeta tierra cuando achicó la brecha del resultado. Bola cruzada de Lorenzo Insigne y por el Callejón de los centrales se metió José María, para poner las cosas 1-2.
La levantada era posible y un nuevo episodio se agregó al intenso drama que se vivía en las gradas. A 4 minutos del final, una mano de Álex Sandro dentro del área fue a revisión por el VAR. El cónclave tecnológico fue muy parecido al de la semana pasada en el partido entre Fiorentina e Inter y después de la enésima reiteración, el árbitro Gianluca Rocchi señaló la pena máxima.
Insigne se paró confiado y eligió el palo derecho de Szczesny. Eligió demasiado bien, porque la caprichosa se estrelló en el poste y no fue empate. Tristeza absoluta en el San Paolo y esa dosis de suerte – que a veces decide hasta campeonatos – indicó que la moneda cayó del lado juventino.
Atalanta derrotó 3-1 a Fiorentina en Bérgamo y renovó su ilusión europea. Convincente reacción del conjunto que dirige Gian Piero Gasperini, en el segundo capítulo de la trilogía que también los tiene como protagonistas de la semifinal de la Coppa Italia.
La squadra viola – hoy de un verde Ferro Carril Oeste – quebró el cero en apenas 3 minutos de juego. Mal pase hacia atrás por parte de Marten de Roon y estuvo muy atento Luis Muriel para robar el balón. Gambeta ante la marca de Berat Djimsiti y zurdazo cruzado para el 1-0 parcial.
La emoción bajó un poco los decibeles del partido porque era momento de recordar al “Gran Capitán”. Al minuto 13, el partido se detuvo y bajaron los aplausos por el recuerdo de Davide Astori, porque mañana se cumplirá un año de su muerte. Conmovedora muestra de afecto hacia una persona que se fue demasiado rápido de este mundo.
Regresó la acción al Atleti Azzurri d´Italia y en 6 minutos el local de casa puso la casa en orden. A los 28´, avivada de Alejandro “Papu” Gómez para salir rápido en un tiro libre y pase a Josip Ilicic. El esloveno gambeteó a 2 rivales y decidió rematar al segundo palo. La bola se desvió en el camino y Alban Lafont quedó desorientado, sin poder evitar el empate. Otra muestra más de la infalible “ley del ex” … aunque no hubo festejo ni nada por el recuerdo de su amigo.
Pasaron 6 minutos y “Papu” Gómez se encargó de dar vuelta el marcador. Gran disparo desde afuera del área para engañar a Lafont y ahora el que mandaba era Atalanta, 2-1 arriba.
A la hora de juego llegó la estocada final. Robin Gosens hizo bien en quedarse en el área enemiga tras una situación de riesgo que Duvan Zapata no pudo capitalizar y la segunda jugada concluyó con un centro de Timoty Castagne para el cabezazo del alemán, quien selló el definitivo 3-1.
Sampdoria navega hacia buen puerto gracias a los goles de su “Viejo Lobo de Mar”. En el Paolo Mazza de Ferrara, los genoveses batieron 2-1 a SPAL y no abandonan el sueño de jugar la Europa League.
Fabio Quagliarella volvió a ser la figura del partido. El inoxidable delantero napolitano de 36 años facturó por duplicado y ya tiene 19 tantos, para empardar a un tal CR7 como máximo artillero del torneo.
A los 4´, una genial tijera de Fabio dejó sin chances al arquero Viviano y 7 minutos más tarde, un cabezazo tras un centro de Karol Linetty redondeó su doppietta. Los de Ferrara recién a los 94´ pudieron descontar, cortesía de un magnífico tiro libre ejecutado por Jasmin Kurtic.
Torino ya muestra su identidad con el método Mazzari y goleó 3-0 a Chievo Verona, en el Olímpico de los Alpes. El colista no pudo resistir los embates del “Toro” y se desmoronó en el último cuarto de hora.
A los 76´, Andrea Belotti fabricó una gran jugada personal para terminar con la sequía. Pase de Simone Zaza y tremendo disparo desde afuera del área, para cortar con la racha de 7 juegos sin anotar.
En el tiempo agregado, los locales confirmaron que su éxito sería por goleada. Tomás Rincón a los 92´ también se animó desde lejos y batió al portero Stefano Sorrentino. Y un minuto más tarde, Simone Zaza culminó un contraataque para el definitivo 3-0.
Udinese ganó el partido que tenía que ganar y se escapa de los problemas. En el Friuli, los comandados por Davide Nicola dieron cuenta de Bologna por 2-1 y quedaron 7 puntos por encima de la zona ardiente.
Rodrigo De Paul de penal abrió la cuenta en el minuto 25 y sumó su séptima diana del campeonato. Los “Felsinei” establecieron la paridad a los 39´, cuando el bahiense Rodrigo Palacio empujó al gol un centro de Riccardo Orsolini.
Pero a 11 minutos del epílogo, tenía que ser otro representante argentino quien dijera presente en el score. Centro de Jens Larsen desde la derecha y cabezazo goleador de Ignacio Pussetto, para el celebrado triunfo friuliano.
Genoa y Frosinone no se sacaron ventajas y terminaron 0-0 en el Luigi Ferraris. Los laciales continúan en zona de descenso, pero sumar fuera de casa no fue visto como un mal negocio (claro que para eso también hay que ganar en el Benito Stirpe y completar la “media inglesa”).
Es que desde el minuto 34, los de Marco Baroni se quedaron con 10 por la expulsión de Francesco Cassatta y decidieron defender el punto como sea. Los “Grifoni” no tuvieron imaginación para vulnerar el cerrojo en la última línea del visitante y el reparto de puntos coincidió también con el de bostezos en las gradas.
(Foto Principal: blackandwhitereadallover.com)
