River arrancó ganando con gol de Matías Suárez pero Argentinos consiguió un valioso empate gracias a la cabeza de Gabriel Hauche.
El dicho dice que acá empieza la verdadera Copa, la que no da lugar a especular y hace que cada partido de estás series de eliminación directa tengan varios ingredientes que hacen atractivo el espectáculo. Y dos equipos que se conocen bien como River y Argentinos no hicieron más que reafirmar esa teoría.
A primera impresión fue el Millonario quién se plantó mejor en el campo, con la presión asfixiante de su tridente ofensivo conformado por Julián Álvarez, Matías Suárez y Brian Romero sobre la defensa del Bicho, resultando que tanto Miguel Torren como Carlos Quintana fallen en la primera distribución y ahí atacar velozmente el arco defendido por Lucas Chaves. Justamente a los 10 minutos Paulo Díaz se hizo con el balón y puso el bochazo largo para Romero, quién le ganó la posición a su marcador y asistió a Matías Suárez para que esté último solo tenga que empujarla al fondo de la red y poner el 1 a 0.
Argentinos estaba siendo doblegado por River, se hacía del balón por qué el rival se lo permitía pero sucedía el mismo error en el traslado del balón, dándole la chance al local para lastimar, sobre todo por el buen trabajo de rotación que hacían los atacantes del Millonario, lo que terminaba dejando a la defensa del conjunto de Paternal jugando mano a mano. De a poco el elenco de Gabriel Milito empezó a imponer presencia en un Monumental que no estaba en óptimas condiciones por la lluvia y cuando el reloj marcaba 40 minutos apareció Gabriel Hauche para poner el cabezazo que estamparia el 1 a 1 en el marcador.
El segundo tiempo trajo modificaciones de ambos lados y junto con ello una leve mejoría en la imagen del equipo de Marcelo Gallardo, con más garra y empuje que ideas y buen juego, incluso estando cerca de aumentar el score, pero Chaves resolvió bien cuando estuvo cara a cara con Suárez. Argentinos no sé desesperaba, no se sentía inferior y el resultado le parecía atractivo sobre todo pensando en el partido de vuelta, por lo que no desesperaba por enfrentar a Franco Armani.
El final del encuentro fue con River tomando cierto protagonismo pero careciendo de una idea clara de juego, desaprovechando las subidas tanto de Montiel como de Angileri y cayendo repetidamente en el recurso de tirar el centro buscando a Girotti, pero chocando una y otra vez con el aplomo y la buena intervención de Chaves. El conjunto de La Paternal resignó la tenencia del balón en los últimos minutos, consciente del desgaste físico realizado y con la tranquilidad que le otorgaba el empate con un gol de visitante, muy favorable pensando en el partido de vuelta.
Ahora River y Argentinos se verán las caras nuevamente en el Diego Maradona con dl resultado abierto, ya que el empate en cero beneficia al Bicho, mientras qje una victoria o un empate con más de dos goles benefician al equipo de Núñez.
Fotos de Nota: Prensa River/Prensa Argentinos
Foto Principal: @RiverPlatePho