La victoria del Club Atlético Patronato por 2 a 1 ante Atlético Tucumán, el pasado viernes en el Estadio Presbítero Bartolomé Grella, no fue 100% favorable y dejó algunas esquirlas en cuanto a lesionados para lo que viene. El director técnico del Rojinegro, Juan Pablo Pumpido, deberá hacer un cambio obligado para visitar el próximo domingo a Talleres en Córdoba.
Desgarro por 2
Cuando promediaba el segundo tiempo del encuentro de Patronato por la cuarta fecha de la “Superliga 2017/18”, ante Atlético Tucumán, Martín Rivero el volante creativo que posee el Santo sintió una molestia en su pierna izquierda y debió salir del campo de juego siendo reemplazado por Julián Marchioni. Allí se empezó a dudar del grado de su lesión y este martes, al mediodía, se le hicieron los estudios pertinentes que detectaron y decretaron un desgarro en el isquiotibial de dicha pierna. De esta manera el jugador deberá perderse, al menos, el partido por la quinta fecha del torneo de Primera División ante Talleres en Córdoba. Luego el parate por las eliminatorias FIFA Sudamericanas para el mundial de Rusia 2018, podría darle la chance de estar en el próximo cotejo como local en el Estadio Presbítero Bartolomé Grella, ante nada más y nada menos que Boca Juniors, pero todo depende de su evolución.
Otro que sufrió este tipo de lesión pero de mayor gravedad fue el mediocampista Tomás Spinelli, producto de un choque en uno de los entrenamientos futbolísticos de la semana pasada con su compañero Gonzalo Di Renzo. Este golpe le produjo una rotura fibrilar de grado 3, y le demandará entre 40 a 60 días de recuperación.
Amistoso para no perder ritmo
El entrenador del Negro, Juan Pablo Pumpido, decidió que los jugadores que tienen hoy por hoy poco o nada de minutos oficiales pudieran continuar con rodaje. Para ello se llevó a cabo este martes por la tarde, en el Estadio Presbítero Bartolomé Grella, un partido amistoso ante la cuarta división de Colón de Santa Fe. Pumpido alistó a Federico Costa en el arco; Lautaro Geminiani, Walter Andrade, Agustín Sandona y Bruno Urribarri en la defensa; Gonzalo Di Renzo, Julián Marchioni y Matías Garrido en la mitad de la cancha; Alberto Contrera de enganche; Mauricio Carrasco y Matías Quiroga en la delantera, con un esquema 4-3-1-2.
En unos 60 minutos disputados que no fueron de lo más vistoso, donde las líneas tuvieron poca conexión y engranaje de cara al ataque, fue muy complicado ver buen sistema de juego y las acciones en los arcos fueron muy escasas. Solamente se pudo abrir el marcador cuando finalizaba el encuentro, cuando a los 28′ del segundo tiempo Rodrigo Migone y a los 30′ Julián Marchioni con un golazo pusieron el 2 a 0 definitivo para los paranaenses. Cuestiones que sirven para que los jugadores se sientan en consideración del cuerpo técnico y sepan que deberán estar al 100% todo el tiempo por si les toca salir al campo de juego.
FOTOS: Sentimiento Rojinegro y Marcelo Miño