Pizzi quedó en el ojo de la tormenta tras la dura derrota ante Central Córdoba. “Mi plazo es el 30 de junio, no lo quieran adelantar”, dijo y agregó “el público es libre de expresarse”.
Pegó duro la histórica goleada sufrida por San Lorenzo a manos de Central Córdoba en la tarde de ayer. Aunque el Azulgrana no venía jugando bien, nadie imaginaba que la tarde iba a terminar así. Y los silbidos al finalizar el partido reflejaron la molestia del pueblo Cuervo.
Y Juan Antonio Pizzi fue uno de los principales apuntados, más tras el polémico cambio que realizo producto de la expulsión de Gianluca Ferrari (entró Gonzalo Rodríguez y salió Oscar Romero). Y el DT se expresó en la conferencia de prensa: “Es el resultado más doloroso de mis etapas de San Lorenzo, la previa y esta. Perder de local de esta forma es doloroso para todos, para mí, para los jugadores y para la gente. Hay que afrontarlo, sufrirlo y preparar el próximo partido“.
El entrenador del Azulgrana continuó con su análisis y sostuvo “es muy difícil hacer una evaluación de este partido cuando jugás con uno menos. Es dar mucha ventaja por el estilo nuestro. Si bien uno trata de buscar soluciones para tratar de equipararlos, los equipos rivales también hacen mucho esfuerzo y con un jugador menos se hace muy difícil”.
Sobre la salida de Óscar Romero el DT argumento “con la expulsión de Ferrari perdimos una posición básica. Es muy difícil de reemplazar con los jugadores de campo. Pensamos que la mejor forma era mantener la línea de cuatro y quedarnos con un solo delantero”, tras lo cual agregó “con cualquier otro jugador que hubiese sacado hubiésemos tenido igual o mayores problemas, pero eso es incomprobable”.
Al ser consultado sobre los silbidos del final, Pizzi respondió “la gente es libre de expresarse. Nosotros nos exigimos al máximo para que se sientan identificados, pero el público es libre de expresarse. En este tipo de partidos es comprensible el mal humor que se genera”.
Y sobre el cierre, con mucho énfasis y también con cierta molestia, el DT se refirió a su continuidad y argumento “sí, me pongo plazos, el 30 de junio. Mi plazo es mi contrato, como debe ser. Los que malinterpretan son ustedes (por los periodistas). Ustedes quieren adelantar el plazo, yo no veo motivos para adelantarlos“.
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