Un conjunto de clubes no contemplará la recomendación de extender la contratación de jugadores. En particular, Estudiantes de Buenos Aires, tuvo la salida anticipada de Diego Martínez en la conducción directiva, Nueva Chicago desestimo tres acuerdos, y San Martin de San Juan, cinco.
Por políticas ligadas a la financiación de la delegación, tres clubes de la segunda división del futbol argentino, dieron el puntapié inicial hacia lo que parece ser irreversible en cierto punto.
Si bien cada entidad deportiva cuenta con un capital disponible, y la asistencia del Estado argentino, la definición crucial consiste en los dirigentes. En lo que refiere a la categoría, se presumen varias novedades de esta dimensión, siendo factible un retorno del campeonato, al que le restan nueve fechas, con dos ascensos, y la cancelación de descensos.
No obstante, se han determinado algunas interferencias de contratación. Tal es el caso de Martínez, quien rescindió el trato con Estudiantes para dirigirse a Godoy Cruz. El conjunto de Caseros, es tercero en la zona A del torneo, y de seguir la normal competencia, tiene serias oportunidades de ascender a la Primera División.
Sin embargo, la terminación de convenios radica en Chicago. Allí Aldo Araujo, Mauricio Asenjo y Valentín Viola, fueron desacreditados en lo contractual por la directiva y percibirán sus haberes hasta junio.
Mientras que en San Juan, se experimenta un exilio colectivo, dada la salida de cinco futbolistas. De común acuerdo, la dirigencia y el interino, Hugo Garelli, dieron por culminada la asociación con Cristian Sánchez, Cristian Barinaga, Diego Cardozo, Facundo Monteseirín y Raúl Iberbia.