Los “Culés” demolieron a los “Rojillos” y les desearon buen viaje a la Segunda División. Los “Merengues” jugaron con suplentes y metieron un set que no fue chiste gallego. La “Cenicienta” se lució en el baile y tuvo mejor canto que los canarios. La “Erreala” pasó de la comodidad al susto y casi agranda a un Valencia desconocido.
Barcelona trituró 7-1 a Osasuna y se mantiene en lo más alto de la tabla de posiciones, junto a su archienemigo de Madrid. Para los navarros era la crónica de un descenso anunciado, aunque no se imaginaron que sería con un score tan abultado, que los iba a poner “Rojillos” de la vergüenza.
Prácticamente en media hora los catalanes decidieron el rumbo del partido con una ventaja de 2 goles en los 45 iniciales. A los 12´ Lionel Messi robó la pelota tras un mal pase de Fausto y se fue solo hacia el arco defendido por Salvatore Sirigu. La “Pulga” no se puso para nada nerviosa y con un par de amagues definió con sutileza ante el achique del portero italiano, para quebrar el cero.
En el minuto 30 llegó el segundo y los blaugranas manejaron el ritmo a voluntad. Un envío desde la derecha por parte de Ivan Rakitic fue capturado casi en el punto penal por Andre Gomes, quien solamente tuvo que inflar la red rival.
Apenas comenzado el complemento, los de Pamplona descontaron por un balón detenido. Gran ejecución de Roberto Torres en un tiro libre que encontró a un Ter Stegen sorprendido e inmóvil. Justo se largó a llover y más allá de gotas lo que empezó a caer en el Camp Nou fueron goles y más goles.
A los 57´ el “Barsa” contestó de la misma manera, con una pelota quieta. Tiro de esquina de Rakitic desde la izquierda y Gerard Piqué tuvo un perfecto movimiento de centrodelantero: bajó la pelota con el pecho y sacó un rápido remate. El balón rebotó en el poste y le quedó servido a Andre Gomes, un optimista del gol que completó su doblete.
Lionel Messi no quiso ser menos y ensayó su slalom marca registrada con pelota dominada, donde los defensores miraron a ver en qué momento sacaba el remate. “Lio” encontró el hueco y colocó el balón junto al vertical derecho de Sirigu. Era el 4-1 en 61 minutos de juego.
Paco Alcácer recuperó la confianza y también quiso anotar su nombre en la pizarra del gol. A los 64´ recibió un pase de Javier Mascherano y definió cruzado ante un indefenso Sirigu.
Sin embargo, la nota destacada fue la media docena. Es que a los 67´ Fran Mérida derribó en el área a Denis Suárez y el encargado de patear la pena máxima fue … Javier Mascherano. Sí, las 63.989 almas presentes en el Camp Nou fueron testigos del primer gol oficial del argentino con la camiseta blaugrana, tras 7 años y 319 partidos jugados en el club.
Quedó tiempo para que nuevamente Alcácer se escape al control de la defensa – hermoso pase filtrado de Denis Suárez – y tras eludir al pobre de Salvatore señale el 7-1 definitivo.
Barcelona ganó, goleó y gustó. Mostró personalidad el pasado fin de semana y el panorama de La Liga se abre. También tiene por delante la chance de un nuevo título en la final de la Copa del Rey. No tiene tan mal sabor el vaso medio lleno de esta temporada.
Real Madrid paseó por Galicia y aplastó 6-2 a Deportivo La Coruña, para recuperar su ilusión de campeonato, ya que todavía la posibilidad de ser campeón depende de sí mismo.
Pese a que Zinedine Zidane no contó con la BBC, el equipo muletto transmitió seguridad y un demoledor poder ofensivo, con un Morata implacable y un inspirado Isco, de lo mejor en lo que va del certamen.
Pasaron 54 segundos y el Madrid ya estaba en ventaja en Riazor. Pase de Isco en posición de número 8 para la entrada de Álvaro Morata, quien sacó un potente derechazo al primer palo que dejó sin chances al guardavallas argentino Germán Lux. Lo que se dice, un gol desde el vestuario.
Tras la ráfaga inicial, los primeros 10 minutos del partido fueron un monólogo madridista, donde hubo chances de golear que fueron conjuradas por Lux.
A los 14´ llegó el merecido segundo grito: James Rodríguez buscó a Lucas Vázquez para un desborde por derecha y fue el volante colombiano quien apareció por el corazón del área para tocar con el revés del pie zurdo y decretar el 2-0 parcial. Demasiadas facilidades en defensa otorgaban lo gallegos.
Lo que siguió fue el show de Germán Lux, quien una y otra vez impidió que los “Merengues” consiguieran una diferencia aún mayor. Hasta con la cara salvó un gol hecho.
Sin embargo, los de Pepe Mel alcanzaron el descuento sólo por la perseverancia de sus hombres de ataque. Centro rasante de Gael Kakuta para la aparición del rumano Florin Andone, quien sacudió la red de Kiko Casilla y achicó la brecha a los 35´. Esto motivó a una leve confusión del Madrid, que permitió una reacción de los locales y casi se produce el inesperado empate. Lo tuvo Kakuta casi sin querer, cuando rebotó en su espalda un mal rechazo de Casilla y la pelota milagrosamente salió por un costado.
Pero los “Merengues” volvieron a enfocarse y estiraron la ventaja a los 44´, cuando Lucas Vázquez aprovechó un flojo despeje de Sidnei y empujó la pelota al fondo del arco.
La segunda etapa tuvo un cambio de arquero en el equipo local: sobrecarga muscular para Lux, quien seguramente se asustó … por no decir que se pegó un jabón.
Isco comenzó a hacerse dueño de la pelota y desde sus pies partían las mejores chances para transformar la victoria en goleada. Un quirúrgico pase suyo para Morata a los 66´ le dio forma al cuarto gol. El delantero dejó en el camino al portero Tyton y se abrió demasiado. Con toda la paciencia del mundo, esperó la llegada de James por el centro. Otra vez el nacido en Cúcuta acarició el balón y pasó a lo gallegos para el cuarto.
No podía faltar el de Isco, quien a los 77´ recibió en soledad un centro cruzado de Lucas Vázquez y acomodó el balón en el segundo palo de un resignado Tyton. “Depor” no fue super pero al menos puso las cosas 2-5 con un cabezazo de Joselu en el minuto 84. Tres minutos más tarde, el controversial Casemiro completó el set con un remate desde afuera del área y el Madrid ya olvidó la pesadilla vivida en la Casablanca ante su enemigo íntimo.
Leganés goleó 3-0 a Unión Deportiva Las Palmas y el sueño de la permanencia está cada vez más cerca. Gran triunfo para los entrenados por Asier Garitano, que capitalizaron al máximo el concierto de horrores en defensa del equipo canario (por algo apenas ganaron 1 partido fuera de casa en lo que va de la temporada).
El Municipal de Butarque recién pudo gritar en la segunda etapa. A los 55´, una floja respuesta del arquero Javi Varas ante un centro de Guerrero le dejó servida la pelota a Luciano Neves, quien le dio un pase a la red y quebró el cero.
Pasaron 4 minutos y Helder Lopes no quiso ser menos. Con un pésimo pase atrás, habilitó a Guerrero para que el oriundo de Toledo estire la diferencia. Y a los 61´, un dudoso penal que el uruguayo Mauricio Lemos le cometió a Neves fue cambiado por gol por el propio ex Corinthians, para sellar el 3-0 definitivo. Sí, en apenas 3 minutos Las Palmas regaló el partido y el pequeño equipo de Madrid celebró a lo grande.
Real Sociedad se impuso 3-2 a Valencia en el Nuevo Mestalla y regresó a la zona de clasificación continental. Justa victoria para lo vascos de Eusebio Sacristán, que tuvieron una ventaja de 3-0 y terminaron apretados sobre el final.
La “Erreala” se adelantó al minuto de juego con una jugada desafortunada del arquero “che”. Sergio Canale buscó la velocidad de Juanmi por la izquierda y el joven nacido en Coín llegó exigido para sacar un remate casi sin ángulo. El balón rebotó en Diego Alves y terminó en el fondo del arco, para un ridículo autogol apenas comenzado el partido.
El portero brasileño tampoco tuvo suerte en su especialidad, ya que a los 30´ Guilherme Siqueira le cometió penal a Álvaro Odriozola y Willian José fue el encargado de ejecutarlo. Pero el duelo entre brasileños los ganó el delantero de Alagoas, para estampar el 2-0 y gritar su duodécimo tanto en el campeonato.
Mikel Oyarzábal apareció por sorpresa casi en el punto penal, y tras recibir un centro rasante de Odriozola consiguió el tercero a los 65´.
Valencia llegó al descuento desde los 12 pasos, con una mano dentro del área de Raúl Navas. El portugués Nani acortó la distancia y reanimó a una fastidiosa afición en 68 minutos de juego.
La “Erreala” volvió a quedarse y Simone Zaza casi que se tuvo que agachar por el segundo palo para decirle que sí con la cabeza a un centro de Joao Cancelo y poner las cosas 2-3.
El envión final maquilló un poco la derrota, pero no esconde debajo de la alfombra una temporada para el olvido del equipo comandado por Voro.
(Foto Principal: La Liga)
