Los últimos mercados de pases han sido bastante complejos para los equipos argentinos. Sin embargo, siempre se las ingeniaron para, de alguna u otra manera, reforzar al menos de buena manera sus respectivas plantillas. Pero si nos remontamos en un tiempo no muy lejano, Independiente tuvo en el año 2005 un verano bastante movido en cuanto a traspasos y con nombres para enmarcar.
Por Roi Waremkraut y Alexis Viojo.
Lucas Biglia llegó a Independiente como una joven promesa a punto de cumplir 19 años, proveniente de la Asociación Atlética Argentinos Juniors.
En el Sudamericano Sub 17 de 2003 disputado en Bolivia, ganó su primer título bajo la dirección técnica de Hugo Tocalli, con la camiseta de la Selección Argentina. Al regresar de ese torneo debutó en Primera en el Bicho de La Paternal el 31 de octubre del mismo año y a partir de ese momento se fue ganando la titularidad a fuerza de buenas actuaciones. En 2004 logró el ascenso a Primera División con compañeros destacados como Leonardo Pisculichi, Gustavo Oberman y Jorge Quinteros.
En el club de Avellaneda disputó 49 partidos, no marcó goles, ni ganó títulos. A mitad de 2006 fue transferido al Anderlecht de Bélgica y en 2013 llegó a Lazio de Italia, donde se desempeña actualmente.
Nicolás Frutos arribó al Rojo desde Gimnasia y Esgrima de La Plata con 24 años de edad. En el Apertura 2004 había marcado 7 goles en 17 partidos con la camiseta del Lobo, conformando una dupla de ataque letal con Claudio Enría.
En Independiente estuvo solamente un año, en el que jugó 28 partidos, marcó 19 goles y no ganó ningún título. En el Torneo Clausura jugó al lado de Federico Insúa y en el Apertura tuvo el placer de formar dupla ofensiva con Sergio Agüero.
En diciembre del mismo año, al igual que Lucas Biglia, fue transferido al Anderlecht de Bélgica, donde se retiró en marzo del 2010 como un ídolo del club. Hoy es entrenador en las divisiones juveniles del conjunto belga.
Franco Cángele desembarcó en Avellaneda luego de una etapa exitosa en Boca Juniors. El extremo jugó 57 partidos en el club de la Ribera donde anotó 10 goles y consiguió 4 títulos (Apertura 2003, Copa Libertadores 2003, Intercontinental 2003 y Copa Sudamericana 2004).
En el Rojo sólo fue un relámpago de fútbol. Disputó 11 partidos y convirtió apenas un tanto. Sin pena ni gloria se marchó a Colón a los seis meses de su llegada.
Fernando Cáceres con 35 años dejó Córdoba de España donde casi no tuvo acción.
Jugó 45 partidos en el club donde no vio red y sólo se fue expulsado en una ocasión. El ex defensor de la Selección Argentina no logró ganar ningún título y luego de 18 meses en el Rey de Copas, regresó a Argentinos Juniors para culminar su carrera.
Robinson Zapata fue el arquero suplente de Navarro Montoya en el Clausura 2005. Llegó desde Rosario Central, donde había atajado un solo partido, pero los hinchas del Rojo lo recordaban por su anterior paso por el América de Cali, en el que fue protagonista cuando, el 13 de mayo del 2003, eliminó a Racing de la Copa Libertadores en octavos de final. El colombiano le atajó uno de los penales de la tanda definitoria al delantero Luis Rueda y marcó el suyo para dejar afuera al eterno rival de Independiente.
Tras seis meses en el club de Avellaneda, sin pena ni gloria, Zapata se fue a jugar a Belgrano de Córdoba. Hoy sigue su carrera en Independiente, pero de Santa Fe, Colombia.
Foto destacada: El Litoral