En el Palacio Tomás Adolfo Ducó, el Globo consiguió una victoria fundamental en sus aspiraciones para mantenerse en primera. Con gol de Alejandro Romero Gamarra a la media hora de juego, y a pesar de los nervios locales, lo aguantó con la figura de Marcos Díaz y respira.
La primer final de las tres que le quedaban al equipo de Azconzábal, era el Unión de Marini, quien trataba de levantar una floja imagen. Por supuesto, la presión, la obligación y los nervios eran del local, quien arrancó mejor con la movilidad de Romero Gamarra y las pelotas quietas de Villalba.
Los pelotazos largos para los puntas tatengues preocupaban, ya que en algunas ocasiones los encontraron mal parados en el retroceso. Luego de un par de avisos , primero de Fritzler con gran remate de afuera que rechazó Castro y de Villalba de tiro libre que pasó cerca, fue el Kaku quien a la media hora capturó un rebote fuera del área y remató fuerte por lo bajo para vencer a Castro y marcar el gol de la victoria parcial.
En el segundo tiempo, la producción del local bajó y lo sufrió. En los primeros minutos, Unión le sacó la pelota y lo llenó de nerviosismo al globo, sobretodo porque se sabía que Temperley había ganado y era imperioso no ceder puntos. Fue allí cuando surgió la figura de su portero, Marcos Díaz, que respondió una y otra vez ante cada centro para Soldano y los numerosos remates de Pittón .
Así fue como aguantó Huracán la ventaja y sigue con vida para resistir en primera.
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