En la dirigencia de Independiente sabían que el día de pagar las deudas llegaría muy pronto, que tantos errores cometidos al momento de contratar jugadores traería los problemas que trajo, pero sobre todo el hecho de no pagar todo en el momento debido. En el Rojo saben que si todo no está cancelado para dentro de unos días caería una inhibición sobre el club.
Cada año los números no cerraban en la tesorería de Independiente, en los libros se veía como el número de pasivo cada vez aumentaba más y más, hasta estar en la actualidad con un monto de 3.945.196.302 pesos. Pero a pesar de esto en cada mercado de pases los refuerzos no paran de llegar y esto fue lo que más dolores de cabeza le trajo.
Desde que comenzó la gestión de Hugo Moyano se invirtió cerca de 75 millones de dólares para contratar a 66 jugadores, siendo los entrenadores que más gastaron: Ariel Holan, Sebastián Beccacece y Jorge Almirón. La lista continua pero lo más importante fueron los gastos que se hicieron durante este periodo, en donde se vieron números astronómicos para comprar jugadores, un ejemplo por Cecilio Domínguez se llegó a pagar 6 millones ,convirtiéndolo en la compra más cara del club y ahora justamente esta transacción es la que más dolores de cabeza le trae a la dirigencia.
Independiente ya está informado que para el 26 de enero deberá liquidar la deuda que tiene con América de México, a quien deberá abonar 5.500 millones de dólares para que no recaiga una inhibición sobre el club. Pero no solo esto sino que también deberá ponerse al día con 340.000 dólares al Celta de Vigo por Pablo Hernández, 290.000 a Defensor Sporting por Carlos Benavídez, 250.000 al representante de Fernando Gaibor (Jorge Chamorro), 200.000 al Johor de Malasia por el préstamo de Jonathan Herrera y 70.000 a Gastón Silva, quien además se encuentra en un juicio laboral con el Rojo y el fallo saldría en febrero.
Pero por supuesto que para poder pagar todo esto la institución deberá tener ingresos de manera urgente, algo que no pudo concretar hasta el momento. En principio se había especulado con la venta de Fabricio Bustos a River, algo que le habría dando un poco de alivio a las arcas del club, pero el jugador decidió esperara al próximo mercado de pases en donde podrá irse libre, ya que su contrato vence el 30 de junio. Otra oferta que hubiese ayudado a esta situación es la que hizo AZ Alkmaar por Alan Velasco, la cual era de 3.800.000 euros en lo inmediato y 4.500.000 más en caso de que el jugador cumpliera determinados objetivos, pero la dirigencia decidió rechazarla.
Ahora con esta situación en la mesa Hugo Moyano deberá ver como saca a flote al club, ya que con la llegada de Eduardo Domínguez todos se ilusionaron y quieren que el nuevo entrenador tenga todo para poder luchar en el torneo. Pero si esto no se puede solucionar el Rojo no podrá realizar ninguna contratación en el mercado de pases de invierno y por más que haga frio para esa época el club estará más caliente que el infierno.
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