Juan Román Riquelme se robó todas las miradas en su regreso a la Bombonera. En medio de un clima político caliente, el Diez fue ovacionado. “Necesito que los hinchas vengan a votar”, expresó.
Nadie puede discutir lo que genera Juan Román Riquelme en el hincha de Boca. Su condición de ídolo está fuera de discusión y ayer la Bombonera fue testigo una vez mas de ello. El Diez volvió al “patio de su casa”, como el mismo definió alguna vez, y fue ovacionado.
Pasaron cinco años para que Riquelme pisará nuevamente el Alberto J. Armando. Esa inteligencia que lo llevó a ser un crack dentro de la cancha parece tan vigente como por entonces. No eligió cualquier dia para volver a la Bombonera. Lo hizo a solo una semana de las elecciones partidarias que elegirán al sucesor de Daniel Angelicci y donde él decidió jugar su partido.
Es que desde que Riquelme decidió acompañar a la lista de Ameal-Pergolini como vicepresidente segundo, y con el manejo del fútbol a su cargo en caso de que la la agrupación Identidad Xeneize se imponga, su nombre pasó a ser el protagonista de la contienda electoral.
Para bien o para mal, con elogios o críticas, Riquelme se robó la atención como hacía en su época de jugador con la número cinco. JR sabe que su decisión de jugar en la arena política puede inclinar de manera determinante la balanza en favor de Jorge Ameal y en detrimento del candidato del oficialismo Cristian Gribaudo.
Justamente hacia estos apuntó Riquelme ayer al expresar “es una cosa triste. Tengo que pensar que es verdad que Gribaudo es hincha de Independiente, tengo que pensar que Angelici es hincha de Huracán porque si no pueden tirar las máscaras de Riquelme al piso”, en referencia al impedimento de ingresar con su careta a varios hinchas.
El Diez vio el partido en el sector de palcos acompañado de Sebastián Battaglia y Marcelo Delgado, dos de sus laderos en tiempos pasados y que suenan como acompañantes de esta aventura política. “Los que están acá no son bosteros. Si me acaban de contar que tiraron las caretas… La semana pasada dejaron entrar la de Gabigol. ¿Quién les dio más alegría?”, señaló duramente el ídolo.
Riquelme fue ovacionado al principio y al final del partido. Cuando llegó al estadio muchos hinchas se acercaron a saludarlo y sacarse fotos. En contraposición, hubo insultos hacia Daniel Angeliici y la Comisión Directiva que fueron menguando a la par del canto de “aliento” de la Doce al equipo.
“Tenemos que ser 40 mil personas para no darles chance de que pase nada raro. Yo quiero volver al club y para volver necesito que los hinchas vengan a votar. Vengan a las 9 porque si no van a hacer trampas y no los van a dejar votar“, pidió Riquelme.
A solo una semana de las elecciones, JR volvió a jugar fuerte con su presencia en la Bombonera. El Diez sabe que está muy cerca de volver al “patio de su casa” y dio una muestra de la admiración que sienten los hinchas por él. ¿Volverá a ser feli Riquelme?.
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