El City y Agüero volvieron a ser

Sumido en un mes con una llamativa (e inédita para Pep Guardiola) falta de resultados, también acompañada de una merma en el rendimiento, el Manchester City visitaba The Hawthorns buscando que la realidad futbolística vuelva a ser similar a la del primer mes de competencia. Ante un rival que tiene como estrategia ceder la posesión, rápidamente el visitante se adueñó de la misma y a los tres minutos de juego comenzó a merodear el área local. Raheem Sterling se sacó de encima a un defensor y probó a un seguro Ben Foster en la primera ocasión del partido. El extremo volvería a llevar peligro pasado el cuarto de hora, tras empalmar de primera un rechazo de la defensa de los Baggies y exigir una intervención del guardameta local, que despejó a córner. Un instante después, en la segunda jugada de ese tiro de esquina, John Stones sería encontrado por un centro de Nolito aunque sería incapaz de vulnerar a un casi vencido Foster.

Finalmente, a los diecinueve minutos llegaría la ventaja para los skyblues. Ilkay Gündogan condujo por el medio y soltó un gran balón filtrado para un Sergio Agüero que no falló y puso el 1-0. Los Citizens continuaron gobernando la posesión y desplegaron un fútbol interesante durante otro buen rato, con agresividad para presionar y también para atacar, lo que le permitó lastimar seguido. Fernandinho volvió a probar a un ya muy solicitado Foster, que volvió a responder satisfactoriamente. Más tarde, Nolito recibió de Agüero tras realizar una diagonal, pero Gareth McAuley salvó en la línea un tercer gol que era cantado, debido a que la definición del español había superado al arquero. Antes de la media hora, el Kun iba a volver a demostrar síntomas de su recuperación goleadora al apropiarse del balón en un desentendimiento defensivo del dueño de casa y sacar un furioso remate que se clavó en ángulo superior izquierdo de Foster.

En el complemento, la visita bajó el ritmo con el que había sometido por momentos a los Baggies, por lo que el anfitrión tuvo un par de ocasiones. Chris Brunt colgó un balón al área que fue buscado con optimismo por Salomón Rondón, quien anticipó una salida imprudente del chileno Claudio Bravo y casi anota el descuento. El venezolano tendría otra ocasión más adelante, pero no pudo conectar un envío de James McClean. La entrada de Jonathan Leko le causó algún que otro problema a la última línea visitante, sobre todo en el flanco derecho, donde el joven extremo incomodó con algunos envíos peligrosos, aunque sin mayores consecuencias. El City iba a acelerar, dando un aviso previo de lo que iba a llegar más tarde de la mano del ingresado Kevin De Bruyne. El belga sacó un centro para un Agüero que estuvo a punto de poner su hattrick en esa acción. A quince del final arribaría el tanto de la tranquilidad definitiva para los de Guardiola cuando Agüero recibió en la puerta del área, movió a un par de marcadores maniobrando hacia la izquierda y terminó soltándole con sutileza el balón a un Gündogan que rompió líneas para llegar habilitado y definir con tranquilidad ante Foster.

Luego del tanto, West Brom pudo haber descontado, ya que Leko generó la ocasión más nítida de su equipo en la parte final desbordando por la derecha y colocando un centro atrás que encontró a McAuley, cuyo remate fue salvado por Bravo con algo de ayuda del poste izquierdo. Para peor, el local recibiría en el descuento el golpe final cuando De Bruyne elaboró una maniobra sobre la izquierda y halló a Gündogan, que llegando desde atrás concretó su doblete y el 4-0 final, un mensaje claro de que los skyblues no resignarán así nomás la lucha por el título, y una demostración de carácter ante un mal momento de varios futbolistas, con Sergio Agüero a la cabeza. El City consiguió un triunfo que no sólo representa tres puntos, sino la clara intención de comenzar a levantarse de un magro mes de octubre y volver a los rendimientos de esos juegos iniciales, que lo tuvieron con puntaje perfecto en Premier.