Central está urgido de encontrar cuanto antes al reemplazante de Walter Montoya, que ya entrena a disposición de Jorge Sampaoli en Sevilla. Hasta ahora, Paolo Montero se las arregla con Paulo Ferrari como volante derecho, probando también a Víctor Salazar algunos minutos ante Unión allí y con Washington Camacho como otra alternativa.
El problema es que ninguno de ellos es naturalmente un mediocampista por derecha, cualquiera de los tres con sus características podrían colaborar con el DT en esa función pero está claro que la búsqueda canalla en el mercado de pases es más bien por alguien que esté más cercano a lo que brindaba el chaqueño.
Durante los últimos días, la búsqueda parecía rondar en un par de nombres: uno el de Fernando Zuqui de Boca, que mientras pretendió a Montoya estaba dispuesto a desprenderse del 50 % del ex Godoy Cruz para complementar un pago de cuatro millones de dólares. Ahora la cosa cambió, piden tres millones de la moneda estadounidense por la totalidad del pase y en Arroyito se bajaron.
El otro que había trascendido era Gabriel Gudiño de Atlético de Rafaela, quien hace semanas atrás había recibido un contacto por parte de un integrante del cuerpo técnico de Montero, pero el propio entrenador fue contundente en conferencia de prensa al desmentir el supuesto interés.
Por su parte, Romero tiene 22 años y viene de tener un 2016 con bastante actividad en el club de Belo Horizonte: 39 presencias en cancha y un gol. El ex Vélez surgió como volante central y, más allá de que tiene versatilidad para recostarse por las bandas, no parece ser exactamente lo que pretende el DT.
Más allá de estas opciones que han trascendido en las últimas horas, entre los dirigentes canallas manejan como mínimo un nombre más que, como Romero, también es un argentino que lleva poco tiempo jugando fuera del país, aunque por ahora seguirá algún tiempo más “tapado”.
