Una batalla histórica se vivió en Alemania en la jornada de ayer donde Roma ganaba por dos goles con un doblete de Paredes desde el punto penal e igualaba la serie, pero un insólito gol en contra de Mancini a falta de diez minutos para el final sumado a un golazo de Stanisic en la última jugada de la noche pusieron el partido igualado y la serie 4 – 2 a favor del conjunto bávaro.
Noche internacional e inolvidable fue la que se vivió ayer en el BayArena por el partido de vuelta de las semifinales de la Europa League, en donde el equipo local empezó este juego con una ventaja de dos goles producto del 0 – 2 conseguido en la capital italiana la semana pasada. Es por esto que Roma salió a jugar con la determinación necesaria para poder llevar el resultado global a una situación de paridad. Pero claro, en frente está quién es seguramente el mejor equipo del continente y lo volvió a demostrar, porque los locales atacaban por todas partes.
Tras un primer tiempo frenético con muchas opciones de gol llegó el momento en el que el juez central se llevó el silbato a la boca señalando penal para la Roma tras un agarrón del capitán Jonathan Tah contra Azmoun. De la ejecución se hizo cargo Leandro Paredes quién remató fuerte al medio para poner el 0 – 1 antes del entretiempo. Un envión anímico muy importante para los jugadores de Daniele De Rossi de cara al comienzo del segundo tiempo.
Cuando corrían 57’ Leverkusen tuvo una jugada muy clara para poner la serie prácticamente liquidada, fue en un contraataque con superioridad numérica encabezado por Frimpong que llevó la pelota en sus pies desde mitad de cancha hasta meterse al área donde abrió hacia su derecha para que Hoffman dispare al arco pero se encontró con una gran respuesta de Svilar, el portero visitante.
Pocos minutos después de esta jugada que ponía al equipo italiano en terapia intensiva vino otra que le dio mucha vida. Porque tras un córner la pelota cayó en las manos del defensor local Tapsoba y tras intervención del VAR, nuevamente el árbitro decretó penal. Al igual que en la primera parte fue Paredes quien tomó el control de una pelota que ardía, pero el campeón del mundo definió de manera espectacular con un disparo fuerte y cruzado poniendo de esta manera el 0 – 2 en el partido y el 2 – 2 en el global. Además, a esta altura, la victoria de Roma era justa.
Pero cuando un equipo tiene un invicto de 47 partidos nunca te podes confiar. No solo porque su juego es de un nivel supremo, sino que además para llegar a ese número sin conocer la derrota tiene que haber otros factores que estén a tu favor. A la suerte hay que ayudarla, pero la suerte existe y quedó totalmente demostrado en la jugada que llegó cuando el reloj marcaba 81’, porque tras un córner para el Leverkusen la pelota iba hacia las manos del arquero romano, pero el número 1 no tuvo una buena intervención entonces la redonda se desvió al segundo palo con una velocidad que fue suficiente para que a Mancini no le dé tiempo de correrse y el rebote en su cabeza terminó en gol.
Después de esto el combinado visitante buscó por cielo y tierra el gol que vuelva a empatar la serie, pero en el minuto siete del descuento una gran jugada de Stanisic puso el 2 – 2 que sería el final. De esta manera, Bayer Leverkusen no sólo pasó a la final sino que además mantiene todavía su invencibilidad. Son 48 los duelos en los que el conjunto de Xabi Alonso no cae derrotado. Un equipo de época. Buscará el título el 22 de Mayo ante Atalanta.
Foto: Diario Sport
